También llamados vehículos no tripulados, pueden ser utilizados para realizar el relevamiento de cursos de agua o zonas costeras; para el monitoreo, saneamiento y conservación de cuencas hídricas.

Una investigación de especialistas en robótica de la Universidad de Buenos Aires (Fi-UBA) permitió desarrollar vehículos autónomos de superficie -ASV, por sus siglas en inglés- que permitirán monitorear las costas.

Estos vehículos no tripulados fueron desarrollados con el objetivo de contribuir al monitoreo, saneamiento y conservación de cuencas hídricas, así como también de aportar soluciones tecnológicas que puedan ser verificadas experimentalmente a escala piloto. Así, en un futuro, estos resultados podrán ser tomados por agencias públicas o actores privados para su utilización.

“Actualmente estamos trabajando en un proyecto que se centra en utilizar grupos de robots marinos para realizar tareas de monitoreo ambiental, como la creación de mapas de los márgenes de arroyos y ríos para estudiar la degradación de costas o la medición de los niveles de contaminación de agua”, explicó el doctor en Ingeniería Ignacio Mas, investigador adjunto del CONICET en el Instituto Tecnológico de Buenos Aires y profesor adjunto en la Universidad de Buenos Aires.

“En general -continuó el director del proyecto-, el monitoreo de aguas se realiza con sensores colocados en posiciones fijas o utilizando buques tripulados, con la complejidad operacional que ello conlleva. Esta utilización de robots permite una cobertura mucho mayor y a un menor costo, facilitando además la repetitividad”.

Para el especialista, estas ventajas son aún mayores si se utiliza no sólo uno sino un grupo de robots autónomos, que convierten al sistema en una red dinámica de sensores que pueden cubrir distintas áreas dependiendo de fenómenos particulares que puedan ocurrir, como pueden ser focos de contaminación.

Por su parte, el doctor Juan Ignacio Giribet, investigador adjunto del Instituto Argentino de Matemática (IAM-CONICET) y profesor asociado de la Universidad de Buenos Aires, agregó: “Nuestro objetivo, ya en el plano experimental, es la utilización de vehículos marinos juntamente con vehículos aéreos, para que, de manera autónoma, puedan sumar sus características y así generar sistemas complejos de capacidades superiores”.

En efecto, avanzan en un sistema donde un dron equipado con una cámara de video puede asistir al robot acuático en su navegación para detectar el mejor camino a seguir en un cauce o posibles obstáculos que encontrará en su camino y planear su trayectoria de manera acorde.