Las Naciones Unidas lanzó un llamamiento de 144 millones de dólares este miércoles pasado, para una operación para descargar un millón de barriles de petróleo crudo de un petrolero varado frente a las costas del Yemen devastado por la guerra durante años, lo que amenaza con un gran desastre ambiental.

Tras ocho años de conflicto, Yemen está al borde de otro desastre humanitario y medioambiental. Un envejecido petrolero varado frente a la costa de Yemen, el FSO Safer, que contiene un millón de barriles de petróleo, amenaza con verter su contenido en las aguas del Mar Rojo.

Para evitar este desastre ecológico, los gobiernos de los Países Bajos y las Naciones Unidas organizaron este miércoles en la ciudad neerlandesa de La Haya un evento en apoyo de un plan operativo coordinado por la ONU que busca responder a la amenaza del vertido.

El proyecto en dos fases cuenta con el apoyo necesario de las partes conflicto y tiene un presupuesto de 144 millones de dólares. De ese monto, se necesitan urgentemente 80 millones para una operación de emergencia de cuatro meses de duración.

Esta última acción consiste en transferir temporalmente el petróleo a otro buque de capacidad equivalente antes de que sea demasiado tarde. 

“Salvar al petrolero que amenaza con verter su contenido al Mar Rojo, es salvar a Yemen y al mundo” ONU

Al cierre del evento, los donantes se comprometieron a aportar 33 millones de dólares. El monto total disponible para emprender la operación asciende a 40 millones que incluyen fondos comprometidos anteriormente.

Hoy se ha dado un importante paso adelante hacia la eliminación de la amenaza que supone el FSO Safer. En el evento de promesas de contribuciones de hoy, hemos conseguido recaudar una cantidad considerable. Seguiremos apoyando a la ONU durante el mes de mayo para reunir el resto de los fondos necesarios. Muchos países están mostrando un gran interés por unirse al esfuerzo. Espero que lo consigamos“, dijo la ministra de Comercio Exterior y Cooperación al Desarrollo de los Países Bajos, Liesje Schreinemacher. 

Los Países Bajos prometieron casi ocho millones de dólares. Los otros donantes que firmaron compromisos fueron Alemania, el Reino Unido, la Unión Europea, Qatar, Suecia, Noruega, Finlandia, Francia, Suiza y Luxemburgo.

El Safer ha estado varado frente a la terminal petrolera de Yemen, Ras Issa, desde 2015, y los funcionarios de las Naciones Unidas han advertido que podría filtrar cuatro veces más petróleo del que se derramó durante el desastre de Exxon Valdez de 1989 frente a Alaska.

David Gressly, Coordinador Residente y Humanitario de las Naciones Unidas para Yemen, dijo que la operación debería realizarse antes de septiembre, cuando los turbulentos mares de invierno aumentarían el riesgo de una ruptura.

El impacto ambiental de un derrame sería grave con las plantas de desalinización cerradas, cortando una fuente de agua para millones de personas, dijo la ONU.

También podría interrumpir el transporte marítimo vital a través del estrecho de Bab al Mandab y crear una catástrofe humanitaria y ecológica centrada en un país ya diezmado por más de siete años de guerra, dijo el organismo mundial. Fuente: Naciones Unidas News