La industria naval como sector estratégico, nuevas tecnologías vinculadas al conocimiento, energías renovables e inteligencia artificial fueron principales ejes de debate durante la Einaval 2022.

Bajo el título de “Innovación, desarrollo y contribuciones tecnológicas para las industrias, la industria naval y la producción” se llevó a cabo uno de los paneles de la séptima edición del Encuentro Internacional de la Industria Naval, Einaval 2022.

La primera parte fue moderada por Alicia Zanfrillo, directora Grupo de Innovación y tecnologías inteligentes en organizaciones sostenibles de la Facultad Regional Mar del Plata de la Universidad Tecnológica Nacional.

Este panel contó con la participación de Ricardo De Dicco, director del Centro de Servicios de Tecnología Nuclear y Energías Alternativas ADIMRA – UNAHUR; y dos invitados internacionales: Enrique Mallón,secretario General Asociación de Industrias del Metal y Tecnologías Asociadas de Galicia – ASIME, y Patricio Fernández Goberna, director General en Industrias Ferri S.A, ambos de España.

La segunda parte estuvo moderada por Fernando Scholtus, decano Facultad Regional Mar del Plata de la Universidad Tecnológica Nacional. 

Participaron Bernardo Martínez Sáenz, presidente de la Asociación de Tecnologías de la Información y la Comunicación de Mar del Plata y Zona, ATICMA; Martín Rappallini, presidente Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires – UIPBA, y José Ramón Antón, director Técnico F. Carceller Ingenieros Navales, de España.

Una de las principales preocupaciones de los exponentes tuvo que ver con la formación de nuevos profesionales en las tecnologías del futuro y en generar las condiciones necesarias para que, una vez formados, éstos quieran continuar su trabajo dentro del territorio nacional.

La gran cantidad de ingenieros metalúrgicos tiene más de 50 años, por eso estamos formando a una nueva camada”, expresó De Dicco.

El directivo caracterizó como un “equipo de profesionales que proceden del sector nuclear y que trabajan en la fabricación de navíos. Hoy conseguir soldadores en Argentina es una problemática, por eso trabajamos en la formación y capacitación para el sector petrolero y la industria naval”, agregó.

Hoy logramos que muchos jóvenes quieran meterse a estudiar programación y diseño, pero una vez que se gradúan trabajan para afuera, entonces nos encontramos con el problema de que no va haber mano de obra para desarrollar los avances que se necesitan”, explicó por su parte Martínez Sáenz.

Según el experto hoy el desarrollo pasa por lograr ese valor agregado que está en las tecnologías y en el conocimiento, pero para que eso funcione el mismo debe ser desarrollado nacionalmente: “La industria naval es la mejor para exportar conocimiento, pensemos en cuántas horas de ingeniería hay en un barco que se construye y se exporta. El desafío es que todo lo que se pone en juego sea nacional“.

Rappallini, destacó que el valor agregado hoy pasa por el desarrollo de tecnologías. En ese sentido, es necesario darle al sector productivo que compite con el mundo la posibilidad de generar ese valor agregado. 

Para el dirigente industrial uno de esos sectores estratégicos es el de la industria naval: “Creemos que lo único que tiene valor es lo que está en el mercado, en una computadora, pero hay valores intangibles como lo es el sector naval, donde tenemos universidades, industrias complementarias y auxiliares, muchas décadas de inversión, muchos ingenieros, es un sector con mucha historia y hay que revalorizarlo y darle las herramientas para que se desarrolle“, expresó.

Tanto Sáenz como Rappallini manifestaron la necesidad de llegar acuerdos entre los diferentes sectores privados y el Estado para lograr un desarrollo sostenido y nacional. 

El primero habló de la posibilidad de transformar a Mar del Plata en una “ciudad del conocimiento“, transformando la matriz productiva de la ciudad, con un parque industrial moderno y una industria naval que exporte barcos, de manera de “repotenciar con la tecnología todos esos sectores estratégicos”.

Con este objetivo, desde ATICMA buscan impulsar una “ley de economía del conocimiento” que se encargue de defender la producción nacional de conocimiento y protegerla, “para que Argentina tenga el poder de desarrollo que necesita para competir a nivel mundial en todas sus industrias“.

Rappallini planteó que hoy, lo que está mostrando el mundo es que, más que contradicción entre el sector público y el privado, lo que debe haber es una integración, de manera que el Estado escuche lo que los privados necesitan para desarrollarse y le brinde herramientas. “Argentina debe darse los debates de desarrollo y crecimiento y no solo hablar de macro e inflación, es condición necesaria pero no suficiente, tenemos que ser un país que crezca y le de soluciones a sus ciudadanos. Así como hace 40 años en la sociedad generamos la unanimidad para apoyar nuestro sistema democrático, hoy debemos lograr esa unanimidad para apoyar el sector productivo”

Aporte de España 

Los tres disertantes españoles que participaron del panel hablaron acerca de cómo la industria naval en su país está haciendo uso de las llamadas tecnologías 4.0 para generar cambios en el sector.

La industria naval española está haciendo una apuesta importante por la utilización de estas tecnologías, que tienen las ventajas de promover la democratización, el acceso sencillo, y a su vez un coste asumible por parte de las empresas”, manifestó Mallón, quién además manifestó su profunda satisfacción por la “apuesta del gobierno argentino por la industria naval que es estratégica para todos los países ya que aporta tecnología, conocimiento, empleo y riqueza”.

Hoy un salto tecnológico ha sido la capacitación que pueda tener una empresa para trabajar con embarcaciones no tripuladas“, caracterizó por su parte Fernández Goberna.

Según el directivo,lo que les interesa es “la robotización y la automatización, que permite tener a distancia una máquina que esté haciendo tareas peligrosas o tediosas, y que es controlada a distancia por operarios capacitados“. 

Uno de los ejemplos expuestos fue el de una embarcación no tripulada que haga un barrido para saber dónde está ubicado el banco de pesca, posibilitando un proceso más eficiente, con menos consumo de combustible, menos tiempo y menos contaminación.

Goberna Antón, hablaron acerca del “gemelo digital” para la construcción de embarcaciones, como un desarrollo clave para el sector naval.

Hoy día la herramienta del gemelo digital, que permite tener un sistema dinámico, previo a tener el barco construido, es un aporte importante que nos permitirá a futuro tener una base mejor para evitar errores en la construcción“, explicó Antón.

Sin embargo, no todo es color de rosa en el país europeo. La falta de capacitación y de inversiones, así como también la necesidad de una legislación que acompañe los nuevos desarrollos, fueron problemáticas mencionadas como desafíos para mejorar el desarrollo de la industria naval española.

Por último, tanto Mallón como Antón hablaron acerca de las empresas eólicas marinas, como posible diversificación de la industria naval, ya que el tema de las energías renovables es clave de cara al futuro y a su vez, es rentable en términos de empleo.

Fuente: Transport & Cargo