Los astilleros SPI y  Río Santiago están dando un paso adelante hacia la asociatividad entre los sectores público y privado, con la vista puesta en la licitación internacional para la construcción de un buque oceanográfico de vanguardia para el país. Este proyecto se enmarca en la decisión del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP) de adquirir un buque de al menos 85 metros de eslora, que será parcialmente financiado a través de un crédito otorgado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

El llamado a licitación especifica que la embarcación debe contar con la capacidad para operar en aguas subantárticas, cumpliendo con la categoría “Polar Class 7”, y debe “responder a una configuración netamente pesquera y oceanográfica de altas latitudes”   para realizar investigaciones oceanográficas y el despliegue de vehículos submarinos a gran profundidad, en un esfuerzo por fortalecer la presencia argentina en la región.

Representantes de los astilleros Río Santiago y SPI han sostenido conversaciones con determinación para avanzar en esta asociatividad que permita presentar una propuesta altamente competitiva en el ámbito nacional. Ambas partes han demostrado un compromiso firme en colaborar para alcanzar los objetivos del proyecto y fortalecer la industria naval argentina.

Las autoridades de SPI y Astillero Río Santiago han destacado el potencial de la industria naval argentina y la virtuosa colaboración entre los sectores público y privado. Se han señalado hitos notables que respaldan la capacidad y experiencia de los astilleros argentinos en la construcción de un buque de esta envergadura.

 “La industria naval argentina ha dado muestras claras de su potencial y capacidades, así como de la virtuosidad de la articulación del sector público y privado. Argentina posee astilleros públicos y privados con capacidad y experiencia suficiente para desarrollar la ingeniería de un buque de este tipo y se traduce en hechos claros y cercanos, con hitos destacables” remarcaron las autoridades de ambos astilleros.

Además, agregaron que “Este es un proyecto de carácter estratégico para la Argentina. Contar con un buque oceanográfico es un símbolo de soberanía, de desarrollo industrial y por ello no podemos dejar pasar esta oportunidad. Se trata de un proyecto de interés para nuestro país y de vital importancia para preservar las investigaciones en su caladero. En este marco estamos conversando con distintos actores del sector para presentarnos con una propuesta competitiva. Tenemos profesionales y trabajadoras y trabajadores altamente capacitados y todas las herramientas para construir esta embarcación en el país”.

Este proyecto de construcción del buque oceanográfico representa un hito en la colaboración público-privada en Argentina, y promete fortalecer la presencia del país en la investigación y exploración en aguas subantárticas, al tiempo que contribuye al desarrollo industrial y la promoción de políticas de compras nacionales. Argentina se prepara para enfrentar el desafío de la construcción de una embarcación de primer nivel que permitirá el avance de la investigación y la exploración en sus aguas.

Por otro lado, se subrayó la importancia de las leyes y políticas públicas nacionales que respaldan esta iniciativa. Programas como Compre Argentino permiten al Estado utilizar su poder de compra para fortalecer la capacidad productiva nacional, priorizando a los proveedores locales en las compras públicas y facilitando la transferencia de tecnología a empresas locales. Asimismo, la Ley 27.418 de Industria Naval establece que las embarcaciones requeridas por el Estado deben construirse en el país, siempre que la industria nacional pueda cumplir con los requisitos y especificaciones necesarios.