En las últimas horas, el conflicto entre Argentina y Paraguay respecto al cobro del peaje en el tramo del río Paraná, entre Confluencia y el puerto de Santa Fe, alcanzó una nueva etapa de tensión ante el anuncio del Presidente paraguayo de que recurrirá al Tribunal Permanente de Revisión (TPR) del Mercado Común del Sur (Mercosur).
Por Ariel Armero
El conflicto adquirió relevancia después de la visita del ministro de Economía, Sergio Massa a Asunción, donde se reunió con el presidente paraguayo Santiago Peña y con otros funcionarios de su gobierno. Después de la visita, el canciller paraguayo Rubén Ramírez Lezcano anunció que se había acordado la suspensión del cobro del peaje en el tramo norte desde el puerto de Santa Fe, la información fue rectificada por diferentes autoridades del Gobierno argentino, explicando que lo que se acordó estudiar una salida para financiar el mantenimiento de la Vía fluvial en referencia, más no la suspensión del peaje.
Diego Giuliano, ministro de Transporte de Argentina, explicó a los medios de prensa que el país ha invertido considerablemente en el dragado y el mantenimiento de la vía navegable del río Paraná durante los últimos 13 años. Argumentó que el peaje se estableció para financiar estas obras y garantizar la seguridad de la navegación. Giuliano enfatizó que Argentina no discrimina por bandera de las embarcaciones, sino que se cobra el peaje en función del tipo de tráfico y que estas tarifas se han aplicado de manera consistente desde 1996.
En la misma línea, el canciller argentino Santiago Cafiero, respondió a Paraguay que el cobro del peaje se mantendrá sin cambios y subrayó que son las empresas privadas que hacen uso de la hidrovía las que deben asumir este costo, y que no es responsabilidad del gobierno de Paraguay.
Cafiero señaló: “Si va un camión argentino por una ruta paraguaya paga peaje ¿Por qué? Porque se supone que a esa ruta hay que mantenerla, darle seguridad, ponerle las señales; y si hay un accidente hay una erogación también de gastos, porque los recursos para contenerlo son recursos de Paraguay. Bueno, en esto pasa exactamente lo mismo“.
En los últimos días, tras la interdicción de un buque paraguayo que se negó a pagar el peaje, el tercero de tres buques incautados por orden judicial, por la misma razón, se profundizó la polémica; aunque en el caso de los dos buques anteriores las empresas pagaron la deuda y dieron por terminado el conflicto.
Tras la interdicción del último buque paraguayo, el gobierno del presidente Santiago Peña advirtió “Estamos solicitando el arbitraje en el ámbito de la hidrovía Paraguay-Paraná. Esto tiene el apoyo de cuatro países, no es sólo una propuesta paraguaya, también está siendo apoyada por Bolivia, Uruguay y Brasil”.
“La hidrovía representa para Paraguay la carretera más importante porque el 80% de nuestro comercio de entrada y salida de productos nacionales pasa por esta ruta, rigiéndonos por el tratado internacional de la hidrovía. No desconocemos la posibilidad de cobrar peajes, pero sí rechazamos que esto se haga unilateralmente, como lo viene haciendo Argentina”, subrayó el presidente Peña, durante una conferencia de prensa.
Para plantear nuevamente esta problemática, la Cancillería de Paraguay dijo que solicitará que se adelante la reunión extraordinaria del Comité Intergubernamental de la Hidrovía, presidido actualmente por Brasil, para finales de septiembre. El presidente paraguayo publicó en las redes sociales un comunicado en nombre de Paraguay, Bolivia, Brasil y Uruguay, donde piden la suspensión del peaje en el tramo norte del río Paraná, entre Confluencia y Santa Fe.
Como reacción al cobro del peaje en el tramo argentino del río Paraná, el gobierno paraguayo recordó la deuda de Argentina por la operación de la hidroeléctrica de Yacyretá, y anunció que decidió, a través de la empresa estatal Administración Nacional de Electricidad (ANDE) se envié más energía al Paraguay restando la disponibilidad de energía eléctrica para el norte argentino.
Adicionalmente, el ministro de economía paraguayo, Carlos Fernández Valdovinos, informó que ante la falta de acuerdos con respecto al peaje, el gobierno paraguayo no dará «ninguna conformidad en ningún organismo multilateral». Se refirió específicamente a los desembolsos del FMI a Argentina, «En el caso del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Paraguay NO dará su ‘no objeción’ para las siguientes revisiones del programa que Argentina tiene con este organismo hasta la cancelación de estos atrasos», dijo el ministro paraguayo
Es de publicó conocimiento que en los últimos años, la marina mercante de bandera paraguaya se convirtió en la tercera flota del mundo, gracias a que están exentos de una serie de impuestos y otras facilidades administrativas. De acuerdo a lo planteado por expertos en el tema, esto puede estar a la base de la dura posición del gobierno paraguayo contra el pago de peaje en la vía fluvial del Paraná.
El ministro de transporte de argentina, Diego Giuliano, hizo un llamado a una salida razonable y a un entendimiento entre los países que utilizan la vía navegable del río Paraná “el río nos une, sobre todo a los pueblos, el pueblo paraguayo, el pueblo argentino, son pueblos hermanos, amigos, leales, a veces esto debería también ser tenido en cuenta por sus representantes” manifestó.
Giuliano, también expresó su confianza en que ambas naciones llegarán a un entendimiento en esta disputa y destacó la importancia de mantener una relación de amistad y colaboración. Ambos países continúan dialogando en busca de una solución mutuamente beneficiosa para resolver esta controversia y garantizar un flujo libre y seguro de comercio por la Hidrovía del Paraná.