Puertos argentinos y uruguayos sobre el río Uruguay fundamentan la necesidad de un mayor calado que permita completar buques ultramarinos, evitar escalas, y exportar directamente a cualquier mercado del mundo. La iniciativa busca bajar costos logísticos, ganar en competitividad, sumar valor agregado a las cargas, y generar empleo genuino para la región.

Autoridades portuarias provinciales y de Concepción del Uruguay recibieron este miércoles al Rector de la Universidad de Concepción del Uruguay, Héctor Sauret, para analizar alternativas conjuntas que posibiliten un mayor desarrollo regional a través de del respaldo a la producción y el fortalecimiento de la industria.

Carlos Schepens, presidente del Instituto Portuario Provincial (IPPER), y Marcelo Gay Balmáz, titular del Ente Puerto Concepción del Uruguay, destacaron el aporte de Sauret a partir del histórico compromiso institucional de la UCU en todas las iniciativas vinculadas con el desarrollo integral de la cuenca del río Uruguay.

Schepens señaló que “estamos abocados a plantear la necesidad de dragar el río a 34 pies de profundidad, un objetivo que posicionaría a toda nuestra región en pie de igualdad con las cuencas e hidrovías más importantes del país. Debemos pensar el puerto, la ciudad, y la región, con una visión estratégica para los próximos 50 años. La UCU siempre ha sido un respaldo importante en todos los temas vinculados con la integración regional, el crecimiento, y la generación de empleo. Desde el conocimiento y la investigación las universidades serán siempre un pilar fundamental para la planificación futura de las comunidades”.

Schepens puntualizó que “los puertos entrerrianos estuvieron prácticamente paralizados durante más de 15 años, y este Gobierno Provincial puso en marcha verdaderas políticas de Estado para la inversión en infraestructura que posibilitaron la reactivación portuaria, el retorno del tren de cargas, la revalorización de la industria forestal, y la aparición del transporte multimodal a través de rutas, ferrocarriles y buques. Esto se ha transformado hoy en una oportunidad para todo tipo de cargas provenientes de la Mesopotamia, Paraguay, Bolivia, Uruguay, y el sur de Brasil. Ahora debemos avanzar hacia una nueva etapa de cara al futuro”.

El Presidente del IPPER remarcó además que “nuestra complementariedad histórica con los puertos uruguayos de Fray Bentos y Paysandú nos lleva a vernos como una única región que necesita de mayor calado para sumar volúmenes de carga y posicionarnos como puerta de salida al mundo de nuestros productores e industriales”.

Una necesidad
Sauret
, por su parte, destacó que “ha sido un encuentro absolutamente positivo, donde destacamos coincidencias centrales para avanzar en conjunto en cuestiones importantes para nuestra ciudad, pero, sobre todo, para nuestra región. La primera de ellas es la necesidad de trabajar para llevar el dragado del río Uruguay de 25 a 34 pies de profundidad. El puerto de Concepción del Uruguay debe ser competitivo, y para ello, el dragado es una cuestión estratégica”, señaló.

En este mismo sentido, el rector de la UCU destacó que “nuestro puerto debe ser analizado como espejo del puerto de Rosario, no solo por el calado, sino también por las enormes posibilidades de industrialización que podrían generarse en el mismo puerto, a partir de la materia prima que produce nuestra región, y que puede sumar valor agregado en este mismo lugar”, remarcó. Sauret resaltó el polo industrial que gira en torno a la soja, y las oportunidades que ofrece la industria forestal a lo largo de toda su cadena de valor.

Debemos tener una visión integral de materia prima y valor agregado que piense nuestro puerto de aquí a 50 años, no solo con los granos, sino también con todos los demás productos. El gobernador Gustavo Bordet participó en el Foro de la Madera de nuestra Facultad de Arquitectura y resaltó que la madera es una virtud para toda nuestra región, y no un castigo, y replanteó una política integral para la industria forestal entrerriana que ha sido de enorme valor para el crecimiento de este sector”, afirmó.

El transporte multimodal y la logística representan un impacto para todos los sectores vinculados al desarrollo regional, y las universidades debemos estar en el proceso de transformación que implican estos factores. Creo que nosotros, desde la universidad, podemos aportar una visión integral sobre estos temas donde el Puerto, y la Zona Franca, deben ser siempre analizados en contraste con la Cuenca del Plata, con Brasil, y el rol de Concepción del Uruguay como tributario del Río de la Plata a través del río Uruguay. Más tarde o más temprano estaremos frente a necesarios procesos de inversión para desarrollar el puerto, y la complementariedad con toda la región es fundamental”, remarcó Sauret.

Cargas suficientes
El Ingeniero Marcelo Gay Balmáz, presidente del Ente Autárquico Puerto Concepción del Uruguay, fundamentó la necesidad de un mayor calado a través de estudios estadísticos y económicos que marcan las ventajas de un dragado a 34 pies de profundidad.
Esto posicionará al puerto de Concepción del Uruguay como una salida directa al mundo para toda la región. Hoy los buques no pueden cargar de forma completa en Concepción del Uruguay por cuestiones de calado, y deben sumar una escala más en otros puertos para completar sus bodegas, esto representa un costo adicional de casi 100 mil dólares para todos los exportadores. Eso nos quita competitividad”, destacó.

Cada buque genera hoy unos 150 millones de pesos que van directamente a los bolsillos de los trabajadores en tres o cuatro días de trabajo, esto sin contar los montos de las transacciones por exportación, ni las cargas aduaneras”, enfatizó.

Con las rutas, los trenes en marcha, y con 34 pies de calado, estas cifras se transforman en verdaderos motores para la generación de empleo, el desarrollo industrial, y la entrada de divisas genuinas por exportación. Todo esto es posible porque la región dispone de graneles y contenedores suficientes para garantizar cargas y que los buques puedan ingresar, cargar, y partir rumbo a su destino final sin sumar costos, lo que representa ventajas competitivas de enorme valor para los productores e industriales que exportan y deben ajustar sus costos logísticos al máximo”.