En una jornada que resalta el profesionalismo y eficiencia de los equipos de rescate, los Guardacostas Río Uruguay y Lago Nahuel Huapi de la Prefectura Naval protagonizaron un exitoso operativo de asistencia al Velero Tánana, que enfrentó las inclemencias del tiempo en aguas subantárticas.

El incidente, aunque desafiante, fue gestionado sin dramatismos, evidenciando la capacidad de respuesta de las autoridades marítimas y sanitarias que prestaron asistencia a las dos pasajeras evacuadas.

El Velero Tánana fue remolcado hasta la Bahía de Ushuaia, y ambas mujeres fueron trasladadas para su atención en el nosocomio local. Venía de realizar un viaje por la Península Antártica, que partió el pasado 18 de diciembre desde el Puerto de Ushuaia.

A bordo del velero, una persona presentaba una fractura de tres costillas, mientras que otra experimentaba malestar estomacal de menor gravedad. La acción coordinada de los Guardacostas y la disposición de las ambulancias del Hospital Regional Ushuaia en el Club Náutico aseguraron una asistencia pronta y efectiva.

Según confiaron los profesionales médicos que intervinieron en la atención de ambas turistas embarcadas, el nivel de profesionalismo exhibido por la Prefectura Naval durante el rescate fue motivo de elogios. Las maniobras de evacuación y el remolque del velero se llevaron a cabo con destreza, reflejando la preparación y experiencia del equipo de asistencia argentino.

También se destacó la labor de las ambulancias del Hospital Regional Ushuaia, listas en tierra firme, que contribuyeron al rápido traslado de las tripulantes hacia la atención médica.

Ambas mujeres fueron ingresadas al hospital para evaluaciones más detalladas, aunque en principio no se registran cuadros de gravedad.

El retorno seguro del Velero Tánana y su tripulación después de enfrentar las adversidades del clima antártico es un testimonio de la coordinación efectiva entre las fuerzas de rescate y los servicios médicos locales.

Según informa la empresa que opera el velero, Tánana es una embarcación de vela 24 metros que combina velocidad y seguridad gracias a su casco de aluminio reforzado y su 280 m² de superficie vélica.

Está equipado con un motor turbo de 250 hp y cuenta con 6 camarotes, 4 baños y un amplio salón, para trasladar con comodidad hasta 12 personas.

El Tánana se encuentra registrado en el Registro Internacional Francés (RIF) y aprobado como Buque de uso comercial (NUC) por French Maritime Affairs, cumple con los estándares internacionales de seguridad y navegabilidad más exigentes.

Fuente: El Diario del Fin del Mundo