Este incidente tuvo lugar cerca del estrecho de Bad al-Mandab, que une el mar Rojo y el golfo de Adén -punto clave de las comunicaciones por barco entre Europa y Asia a través del canal de Suez.
Se enmarca en una serie de acciones de los huthis, que incluyen el bloqueo de varios barcos rumbo a Israel y la retención del ‘Galaxy Leader’. A pesar de no reportarse heridos ni daños significativos, el ataque ha suscitado serias preocupaciones sobre la seguridad marítima internacional y los efectos potenciales en el comercio global.
Esta situación plantea serios desafíos para el comercio internacional, especialmente para las empresas que dependen de las rutas marítimas para el transporte de bienes entre Asia y Europa.
Además, estos ataques destacan la volatilidad de la región y la necesidad de una respuesta internacional coordinada para garantizar la seguridad en las rutas marítimas. La situación en Gaza y las tensiones entre Hamás e Israel siguen siendo puntos críticos que contribuyen a la inestabilidad regional.
“Esta cuestión no puede ser abordada por la industria naviera mundial por sí sola, e instamos a la sociedad internacional a unirse para encontrar una solución rápida que ponga la situación bajo control.” Pide la empresa Maersk en la reconocida red social X.
