El próximo 22 de noviembre vence la concesión de uno de los elevadores de granos del consorcio de Puerto Quequén. Se trata de una de las partes donde funcionaba la Junta Nacional de Granos, creada en 1945 durante el Gobierno de Perón. La planta fue privatizada en 1992, bajo la Presidencia de Carlos Menem. Frente a esta situación, algunos sectores intentan dar el debate sobre devolverla a manos del Estado.
Redacción Globalports
Los elevadores de granos son parte de la cadena productiva del trabajo portuario, siendo quienes tienen la tarea de cargar el contenido de los camiones arriba de los barcos. Según Pedro Peretti, integrante de la Asamblea Popular por la Soberanía del Puerto Quequén, actualmente circulan en el puerto alrededor de 7 millones de toneladas al año.
Teniendo en cuenta que el Puerto Quequén es uno de lo más profundos y económicos de la República Argentina, con un dragado de 50 pies, el paso de la concesión a un Consorcio de gestión estatal podría significar un importante ingreso para el país.
“Es una gran oportunidad para que YPG Agro monte una gran empresa testigo del comercio y exportación de frutos del país”, manifiesta Peretti en un video difundido por la Asamblea, invitando a una charla que realizarán el miércoles 5 de octubre para visibilizar el reclamo.
Por su parte, Mario Daúl, otro miembro de la Asamblea, recordó la gran inversión realizada para su profundización: “nos costó a los bonaerenses 90 millones de dólares, pero hemos bancado y pagado la profundización de este puerto”.
Hoy, 5 de octubre, a las 18 horas se desarrollará la “Asamblea Popular por la Soberanía del Puerto Quequén” convocada por gremialistas.
La Asamblea Popular por la Soberanía del Puerto Quequén no es la única pujando por un proyecto estatal. El 15 de junio de este año, la diputada provincial Natalia Sánchez Jáuregui, al frente de la Comisión de Intereses Marítimos, Portuarios y Pesca, presentó una propuesta similar: un proyecto de ley para crear una sociedad del estado provincial denominada “ELEVADOR QUEQUEN S.A”.
“Escuchando e interpretando las necesidades de la comunidad, sobre la falta de respuestas en salud, el estado de las calles, el deterioro por la entrada y salida de los camiones al puerto, y pensando en los beneficios para la gente, generamos este proyecto para que las ideas se conviertan en acciones”, expresó Jáuregui en un comunicado de prensa.
La propuesta establece la creación de una sociedad que tendrá como objeto social la explotación comercial del elevador de granos que fuera de la ex Junta Nacional de Granos en su actividad de descarga de camiones y vagones para la carga de buques en sus muelles de atraque. Según la Presidenta de la Comisión de Intereses Marítimos, Portuarios y Pesca de la Cámara de Diputados de la Provincia, los beneficios económicos que se extraigan de dicha actividad, “impactarán de lleno en los habitantes de la región”.
El proyecto plantea una distribución de la siguiente manera: 25% al Hospital Municipal José Irurzun de Quequén, 25% al Hospital Municipal Emilio Ferreyra de Necochea, 25% para nuevas inversiones a los fines de mejorar la productividad del elevador y 25% para reparación de vías terrestres de acceso a Quequén y Necochea afectadas por el paso de los camiones en su tránsito hacia el elevador y/o reparaciones de la polución que produce su actividad.
“Es hora de que la política empiece a discutir los grandes temas que tienen importancia estratégica para el país, como son los puertos, el canal de Magdalena, entre otros”, destacó la funcionaria.
El Puerto Quequén es definido por la Ley Provincial N.º 11.414 de 1993 como un “ente público no estatal”. El Consorcio de Gestión del Puerto, constituido a partir de dicha ley, concentra los intereses del estado provincial, el municipio del Partido de Necochea, los trabajadores portuarios y los sectores privados interesados en el desarrollo portuario de la región. Comenzó formalmente sus actividades el 1º de marzo de 1994, y actualmente se encuentra en manos de Terminal Quequén S.A, conformada por exportadores multinacionales, Bunge, Cofco, Glencore (ahora denominada Viterra), y otras menores.