Por Violeta García, Globalports//
El presidente de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA), Gustavo Idígoras, manifestó su postura respecto al llamado a licitación para la concesión privada de la administración de la Hidrovía Paraguay-Paraná, anunciado recientemente por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos.
En declaraciones a Radiópolis por Radio 2, Idígoras destacó la importancia de retomar un «círculo virtuoso«, pero enfatizó que las condiciones del pliego serán determinantes para el éxito del proyecto.
“La Hidrovía fue un motor de competitividad para la producción argentina, permitiendo inversiones por 15 mil millones de dólares en infraestructura portuaria y la exportación de 80 millones de toneladas. Estamos entusiasmados con la decisión de convocar a una licitación internacional por 30 años, pero vamos a analizar los pliegos en detalle para asegurarnos de que incluyan elementos esenciales, como mayor profundidad y tarifas competitivas«, señaló.
Críticas y propuestas
Aunque CIARA respalda el proyecto de concesión de la hidrovía, Idígoras expresó preocupaciones sobre algunos aspectos de la licitación:
- Duración de la concesión: Si bien el gobierno optó por 30 años, la Cámara había propuesto inicialmente un esquema de 15 años renovables. «La tecnología y el perfil de los barcos evolucionan rápidamente. No queremos convivir con una ‘foto estática’ por tres décadas», afirmó.
- Control y supervisión: Desde CIARA han insistido en la creación de un órgano profesional de control que incluya a los usuarios. Según Idígoras, el gobierno ha prometido un esquema conjunto entre la Subsecretaría de Puertos y la Administración General de Puertos, pero queda pendiente su confirmación.
- Profundidad y costos: CIARA considera fundamental alcanzar una profundidad de 44 pies para optimizar los costos logísticos. «Esto reduciría los costos de fletes en al menos un 30%, evitando la necesidad de completar cargas en otros puertos, como Bahía Blanca o Brasil«, explicó.
El empresario también abordó las preocupaciones sobre la delegación de tareas clave, como los estudios de impacto ambiental, al concesionario. «El pliego propone un modelo novedoso en el que el Estado asume un rol mínimo, delegando estas tareas en el empresario. Este esquema requiere una interacción fluida entre usuarios y concesionarios para garantizar que se cumplan los objetivos de sostenibilidad y competitividad«, sostuvo.
Asimismo, Idígoras resaltó que CIARA apoya el modelo de concesión «a riesgo empresarial y sin subsidios estatales«, subrayando que este enfoque protege las finanzas públicas frente a eventos adversos, como la reciente sequía que generó pérdidas millonarias.
El titular de CIARA expresó que un equipo de especialistas, que incluye a investigadores del CONICET y la Universidad Nacional del Litoral, está analizando el pliego de condiciones para garantizar que sea competitivo. «Si no se diseñan las condiciones adecuadas, el resultado será tener la tarifa más cara. Es mejor esperar dos meses que hipotecar la hidrovía por 30 años», concluyó Idígoras.
La licitación de la Hidrovía Paraguay-Paraná abre una nueva etapa para uno de los corredores fluviales más importantes de Sudamérica. Escuchar las voces críticas y propositivas, serán clave para definir un modelo que equilibre competitividad, sostenibilidad y desarrollo económico.