Cientos de personas recibieron a los 326 tripulantes, hombres y mujeres, de la Fragata Libertad a su regreso al puerto de Buenos Aires, donde el buque escuela completó su 50 viaje de instrucción por el mundo, donde recorrió más de 2.200 millas náuticas durante cinco meses.
La espera
Los familiares, provenientes de diversos puntos del país, aguardaron desde las 9 de la mañana la llegada de la Fragata, que finalmente tocó el Apostadero Naval a las 18.30, debido a un conflicto gremial con las empresas navieras.
El buque permaneció a la altura de la ciudad de La Plata hasta que el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria por quince días tras la medida de fuerza realizada por los remolcadores navales.
La decisión de la cartera laboral se dispuso tras la intervención de varias áreas del Ejecutivo, entre ellas del Ministerio de Defensa que encabeza Jorge Taiana, quien desde el viernes mantuvo gestiones para destrabar el ingreso de la Fragata Libertad al puerto de Buenos Aires.
Cientos de familiares y público colmaron las instalaciones del puerto, brindando un gran recibimiento a sus 326 tripulantes, hombres y mujeres.
La llegada
La unidad, al mando del Capitán de Navío Carlos Pedro Schavinsky, condujo a Guardiamarinas en Comisión integrantes de las Promociones 150 y 151 del Escalafón Comando Naval, 85 y 86 de la Infantería de Marina, y 106 y 107 del Cuerpo Profesional, de la Escuela Naval Militar.
De esta forma el Buque Escuela de la Armada, cumplió una vez más con su principal misión: la de completar la formación profesional, contribuyendo al incremento de conocimientos náuticos y a su formación en la cultura del trabajo en equipo y en el desarrollo de aptitudes de liderazgo.
El 50° viaje de instrucción
La tripulación de 326 personas, de las cuales 57 son mujeres, llegó compuesta por 28 oficiales, 92 guardiamarinas y 191 suboficiales. Además navegaron a bordo invitados de institutos de formación de la Armada Argentina ( Liceos Navales “Almirante Storni” y “Almirante Brown”, y de la Escuela Nacional de Náutica).
También de otras Fuerzas Armadas (Ejército Argentino y Fuerza Aérea Argentina); de Fuerzas de Seguridad (Gendarmería Nacional y Prefectura Naval Argentina), del Instituto del Servicio Exterior de la Nación (ISEN).
Además tuvo 12 invitados extranjeros de las armadas de Alemania, Bolivia, Brasil, Chile, Ecuador, España, Francia, Irlanda, Italia, México, Paraguay y Perú.
Durante el itinerario, que inició el 30 de abril y tuvo una duración de 5 meses, recorrió un total de 22.038 millas náuticas lo que equivale a una vuelta al mundo rodeando la línea del Ecuador, con un recorrido de 40.814 kilómetros.
El buque estuvo 148 días fuera de su apostadero, de los cuales navegó durante 113 días y permaneció 35 en puertos extranjeros durante su visita a 11 ciudades de América y Europa.
Las ciudades visitadas fueron Fortaleza (Brasil), Castries (Santa Lucía), Santo Domingo (República Dominicana), La Habana (Cuba), Veracruz (México), Baltimore (Estados Unidos de Norteamérica), Dublín (Irlanda), Saint Malo (Francia), Toulon (Francia), Cádiz (España) y Río de Janeiro (Brasil).
Las banderas argentinas flameando a metros de la llegada, con su tripulación alineada en cada uno de su puestos, lo que sirvió de marco para lo que luego fue el ingreso masivo de los familiares cuando se abrieron las vallas al llegar la Fragata.
El comandante del Buque, Carlos Pedro Schavinsky, señaló a Télam al descender que “El recibimiento fue maravilloso, nos recibieron de manera increíble poder estar al frente de la Fragata es un honor y un placer”.
Entre quienes esperaban a la tripulación estaba el catamarqueño Juan Morales, quien se mostró conmovido al reencontrarse con su hijo, el cabo primero Ivan Morales.
“Es su tercer viaje pero para nosotros es siempre el primero, siempre el más importante, venimos de la localidad de Belén para abrazarlo”. Su mujer Daniela lo esperaba con su beba Martina de 11 meses y su primer hijo Martín, de 6 años.
Nora Maidana dijo por su parte: “Me vine desde Santa Lucía, Tucumán, para este momento, siento orgullo y admiración”, mientras su hijo, el maquinista Alberto Roldán (19) se confundía con ella en un abrazo.
A su vez, el diplomático Fabricio Sordoni, de la Cancillería Argentina, indicó que “en el viaje de instrucción nos detuvimos en Foxford, un pequeño pueblo de Irlanda, donde nació el almirante Guillermo Brown, para rendir homenaje al comandante de las fuerzas navales durante gran parte de la guerra por la Independencia argentina”.
“Eso ocurrió el 30 de julio y la pequeña localidad irlandesa nos acompañó con aplausos”, recordó Sordoni.
Fuente: Telám