La Fundación Fada elaboró un Monitor de Exportaciones en el que relevó la importancia de los complejos agroexportadores que, en el primer semestre, ingresaron al país U$S 20.000 millones.

Argentina es el primer exportador mundial de aceite y harina de soja, yerba y porotos; el segundo de maní; y el tercero de maíz, soja (como granos), girasol y peras.
Esos son los nueve productos agroindustriales en los que el país forma parte del podio mundial de comercio exterior, según un Monitor de Exportaciones que elaboró la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (Fada) y que estará presentando este jueves a las 18.30.

En tanto, también hay otros seis alimentos que están dentro del “top five”: la cebada cervecera, en el cuarto puesto; y la carne bovina, los camarones, los langostinos, el té negro y la leche en polvo, en el quinto lugar.

De acuerdo con el reporte elaborado por Fada, en el primer semestre las exportaciones agroindustriales ingresaron al país 20.000 millones de dólares, lo que representa el 74 por ciento del comercio exterior total de Argentina.
EL 70 por ciento provino de la cadenas granarias, el 15 por ciento de economías regionales, el ocho por ciento de carnes, el dos por ciento de lácteos y el cinco por ciento de otros productos.

Derribando mitos
El objetivo del documento elaborado por los investigadores de Fada es poner en cuestionamiento algunos mitos que suelen presentarse cuando se debaten las estrategias exportadores y su supuesto perjuicio sobre el mercado interno y los consumidores locales.

Por ejemplo, uno de los aspectos que plantea Fada es que exportar granos, carne o legumbres es necesario para que ingrese el dinero que se necesita para lo que no se produce en Argentina, como celulares, computadoras o Netflix.

Otro mito derribado es que la supuesta contraposición entre mercado interno y externo. Por ejemplo, en el caso de la carne vacuna, se exporta el 27 por ciento del total de la producción, y aun así el consumo es uno de los más altos del mundo, con un promedio de 51 kilos por habitante por año.

Lo mismo sucede con el pan: se exporta más del 60 por ciento del trigo, pero cada argentino demanda un promedio de 72 kilos de pan por año. Fuente: Agrovoz