Tras un año desafiante para la agricultura argentina, la campaña de la cosecha gruesa 2023/24 inicia con un panorama prometedor, marcado por una notable recuperación hídrica que aleja los temores del desastre vivido el año pasado.

Esta esperanzadora perspectiva contrasta drásticamente con la situación del año pasado, cuando se enfrentaba una de las peores campañas desde 2008/09. La sequía extrema del año anterior resultó en la pérdida del 60% de la cosecha de soja y el 36% de la de maíz, sumiendo al sector agrícola en una crisis. Sin embargo, el cambio ha sido radical. Noviembre de 2023 trajo consigo frentes de tormenta beneficiosos para la región pampeana, esenciales para la recuperación hídrica. El informe de la GEA/BCR destaca esta mejora, señalando un cambio significativo en las condiciones productivas del país.

Expertos de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) proyectan una significativa producción agrícola, estimando 50 millones de toneladas en soja y 56 millones en maíz.

A pesar de este optimismo, los desafíos persisten. La incertidumbre rodea al fenómeno climático de El Niño, con una probabilidad superior al 55% de que se mantenga un evento fuerte durante el primer trimestre de 2024. Esta situación podría generar condiciones climáticas impredecibles, lo que requiere que los agricultores se mantengan alerta y preparados para adaptarse a cualquier eventualidad.

Fuente: BCR / GEA