La botadura del nuevo pesquero artesanal “Virgen de Itatí II” se dio en las instalaciones del astillero Aloncar el pasado sábado por la tarde.

En una tarde colmada de alegría, el Astillero Aloncar de Quequén celebró este pasado sábado la finalización de una nueva embarcación, demostrando una vez más el potencial de la industria naval local y su capacidad para generar puestos de trabajo. 

Hugo Obregozo, líder del astillero ALONCAR.SA expresó su emoción y orgullo al hablar sobre la construcción de barcos desde su empresa y destacó la importancia de este logro en tiempos difíciles.

El barco recién terminado es el tercero de una serie de tres, y ya se está evaluando la posibilidad de iniciar una nueva serie. 

La embarcación, diseñada específicamente para la pesca artesanal, cumple con las regulaciones de la autoridad pesquera, con una eslora máxima de 9,90 metros. Además, cuenta con una innovadora potencia de motor que permite tener energía eléctrica de 220V y 380V, algo inusual en este tipo de barcos. Estos navíos se dedican a la pesca de langostinos en el Puerto de Rawson.

Obregozo destacó que el diseño del barco fue realizado en colaboración con un grupo de ingenieros de Mar del Plata, y que tanto el motor propulsor como la caja son importados. La construcción de esta embarcación demandó la ocupación de 110 puestos de trabajo, lo cual representa un importante impulso para la economía local. La inversión en este nuevo pesquero ronda los 600 mil dólares.

El gerente de la empresa, ubicada en las cercanías del río Quequén, también se refirió al panorama de la industria naval y expresó su satisfacción ante la posibilidad de que un nuevo astillero se establezca en Quequén. Para Obregozo, esto no representa una competencia, sino un crecimiento conjunto que fortalece la región y brinda nuevas oportunidades.

La botadura contó con la participación del propietario del buque, Ramón Sovak, así como de Hugo Obregozo, propietario del astillero.

Estuvieron presentes autoridades de la Prefectura Naval Argentina, representantes del Consorcio de Gestión de Puerto Quequén, la Secretaria de Transporte de la Nación, Jimena López, el párroco Gonzalo Domench, encargado de realizar la bendición, y vecinos de la ciudad.

La construcción de este barco íntegramente en Quequén no solo es motivo de celebración para el Astillero Aloncar, sino también un claro ejemplo del potencial y la capacidad de la industria naval local para impulsar el desarrollo económico y generar empleo en la región.

Fuente: Noticias de Necochea