Producto de la bajante, crece la importancia de los puertos del sur de Bs.As en los despachos de maíz. Al mismo tiempo, los embarques de harina/pellets y aceite de soja cayeron en de junio respecto de los volúmenes despachados el mismo mes del año previo.

A lo largo del mes de junio, la situación de la bajante del Río Paraná se fue complicando con el correr de las semanas, y hacia finales del mes pasado el nivel del agua a la altura del Gran Rosario alcanzó su medición más baja desde fines de 1970. Esto repercutió considerablemente en el volumen de toneladas despachadas de maíz y derivados de soja desde los puertos del Up-River.

A pesar de que la molienda de soja en lo que va del año estuvo considerablemente por encima respecto de igual período del 2020 (18 Mt entre enero y mayo del 2021 vs. 15,5 Mt en los primeros cinco meses del año anterior), durante el mes de junio se embarcaron en los puertos del Gran Rosario un total de 2,49 Mt de harina/pellets de soja, una caída del 2% respecto de mayo y un 12% menos que en igual mes del año anterior. Además, es el volumen más bajo para igual mes desde la campaña 2017/18. 

En cuanto al aceite de la oleaginosa, el volumen despachado durante el último mes alcanzó 553 mil t, una caída de 10% y de 11% con relación a mayo y junio del 2020 respectivamente, y, al igual que la harina, el volumen más bajo en cuatro años. Además, es necesario realizar una salvedad ya que durante el ciclo 2017/18 la severa sequía que afectó a la producción sojera redujo considerablemente la disponibilidad local de granos, lo cual repercutió en una menor industrialización de poroto de soja, y, por lo tanto, un menor volumen de productos derivados. 

Dado que en Rosario y sus alrededores se concentran la gran mayoría de plantas de molienda de oleaginosas que posee el país, lo que ocurra con la bajante del Paraná influye fuertemente en los despachos de estos derivados al exterior, ya que no es posible completar la carga en otros puertos.

Distinto es lo que ocurre con el maíz. Para este cereal, cuando los barcos deben partir desde el Gran Rosario con una carga en bodega inferior a la total disponible como ocurre actualmente, pueden completar la carga en los puertos del sur de la Provincia de Buenos Aires. 

Durante el mes de junio, el volumen despachado del cereal desde todas las terminales portuarias del país totalizó 4 Mt, un 20% más que durante el mes de mayo, aunque una caída del 11% respecto de junio de 2020. 

Sin embargo, teniendo en consideración lo mencionado anteriormente, resulta conveniente analizar qué proporción del total se embarcó en el Up-River y qué proporción en los puertos del sur de Buenos Aires. Tal como se puede apreciar en el siguiente gráfico, los embarques desde el Gran Rosario representaron el 75% del total, la menor participación desde al menos los últimos cuatro años. Paralelamente, el volumen despachado desde los puertos de Bahía Blanca y Necochea/Quequén representaron el 22% del total de maíz enviado al exterior, la proporción más alta desde al menos el 2018. 

Para lo que viene, existe un interrogante adicional. Ya ha comenzado la cosecha del maíz tardío y se proyecta que ingrese un elevado volumen de granos en los próximos meses. De hecho, según datos de MAGyP, aún restan por cosecharse 2,7 Mha de maíz en todo el país, la mayor superficie de la historia para estos momentos del año. Además, 2,1 Mha de ese total se encuentran en la región de influencia de los puertos del Gran Rosario, lo cual también marca un récord. Este gran remanente de área por cosechar es consecuencia de la sequía de los meses de septiembre y octubre, que demoraron las siembras. 

En el plano internacional, todas las miradas están puestas con lo que ocurrirá con la producción estadounidense tanto de soja como de maíz en la nueva campaña. La semana pasada, el USDA informó que el área efectivamente sembrada con maíz se ubicó en 37,5 Mha, 500.000 por debajo de las estimaciones de los analistas, en tanto que el área destinada a soja alcanzó 35,6 Mha, 600.000 menos que lo estimado por el mercado. Habiendo ya culminado con las siembras en aquel país, la atención se centra en el clima, clave para determinar los rindes y, de esta manera, la producción que se obtendrá. 

Hasta la semana anterior, había regiones del medio-oeste norteamericano, principal zona productora tanto de maíz como de soja, que presentaban temperaturas elevadas y escasas precipitaciones, por lo que la pérdida de humedad de los suelos fue considerable. Sin embargo, y tal como se puede apreciar en la imagen anterior, los pronósticos para los próximos días indican que las precipitaciones se encontrarían considerablemente por encima de la norma en amplias zonas clave, lo cual daría un fuerte impulso a los cultivos justo cuando comienzan la etapa de polinización, momento crítico para la determinación de los rindes. 

Estas noticias sobre el clima han producido una fuerte caída en los precios en la plaza de Chicago. El martes, la soja cayó más de US$ 30 /t en su contrato con vencimiento más cercano, equivalente a un 6%, mientras que el maíz registró una caída de US$ 16 /t, también un 6%. Y la dinámica de precios en la plaza local no estuvo exenta a este fenómeno. El precio equivalente en dólares de la CACR del maíz del martes cayó US$ 11 /t, es decir, un 6%, y se ubicó en US$ 177 /t, mientras que la soja sufrió una retracción de US$ 12 /t, equivalente a un 4%. 

En cuanto a los valores FOB ofrecidos en los principales puertos de los mayores exportadores tanto de maíz como de soja, se puede apreciar que, actualmente, los precios en el Up-River de Argentina son los más bajos en comparación con los demás puertos seleccionados. Este fenómeno responde a dos factores. Por un lado, que actualmente nos encontramos en plena cosecha del maíz, en tanto la de soja ha finalizado muy recientemente, en comparación con los demás países que ya se encuentran bien avanzados en su ciclo comercial y la mercadería ya no es tan abundante. Por el otro, existe un castigo en los precios para los productos en el Up-River, por los costos que acarrea la bajante del Río Paraná, que están analizados en profundidad en el artículo respectivo de la presente edición del Informativo Semanal. Sin embargo, más allá de eso, se puede observar que el comportamiento de los precios ha sido similar en los principales polos exportadores para ambos cultivos, ya que en la última semana se observa una caída en los valores, pero en la comparación interanual se aprecia un fuerte incremento respecto de un año atrás.

Fuente: BCR, Tomás Rodríguez Zurro – Emilce Terré.