La Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (CAPIP), representante de las principales empresas del sector, realizó un urgente llamado a las autoridades de las provincias de Chubut y Santa Cruz para declarar el estado de emergencia pesquera. Esta solicitud busca implementar medidas de apoyo y recuperación ante una crisis que se profundiza día a día, afectando gravemente a la industria.

El presidente de CAPIP, Agustín de la Fuente, junto a las empresas miembros de la cámara, dirigió este pedido a los municipios, legislaturas y gobernaciones involucradas, enfatizando la necesidad de acción inmediata frente a la crítica situación económica, cambiaria y operativa que enfrenta el sector. “La profunda crisis no deja alternativa alguna más que solicitar por parte de las autoridades el acompañamiento“, indicó.

Este llamado no es nuevo; sin embargo, la falta de acciones concretas por parte de los gobiernos provinciales ha exacerbado la urgencia de la situación. El sector pesquero se encuentra en un punto de inflexión crítico, enfrentando desafíos tanto a nivel nacional como internacional. 

La guerra en Europa del Este, la inflación global, las restricciones post-pandemia en Asia, y una marcada caída en la demanda y precios internacionales, sumado a la competencia del langostino de criadero, han llevado a un exceso de stock sin vender, poniendo en riesgo la sustentabilidad de la industria.

Los costos de producción y operación han visto un aumento considerable debido a factores como el alza en el precio de combustibles, aceites, packaging, y logística, así como los costos portuarios y cargas impositivas a nivel municipal y provincial. A esto se suma la posible reducción de la temporada de captura de langostino y las dificultades para procesar otras especies como la merluza.

En este contexto adverso, la CAPIP ha mostrado un compromiso firme con la responsabilidad social empresaria, manteniendo la operatividad y las fuentes de trabajo para evitar conflictos laborales y sociales. Sin embargo, la presión impositiva y las complicaciones en la gestión por parte de las autoridades provinciales representan una carga insostenible para el sector.

La CAPIP aclara que su intención no es generar confrontaciones, sino buscar el apoyo y acompañamiento de las autoridades para superar esta profunda crisis. El sector pesquero, vital para el desarrollo económico y social de las provincias involucradas, necesita de medidas urgentes que permitan enfrentar este desafío con estrategias políticas acertadas que aseguren su futuro.

La situación actual “no deja otra alternativa” expresaron desde la Cámara que solicitó el apoyo de los gobiernos de Chubut y Santa Cruz, para hacer un esfuerzo conjunto por preservar una actividad esencial para la región. La CAPIP insta a una respuesta rápida y eficaz que permita al sector pesquero patagónico navegar a través de esta tormenta hacia aguas más tranquilas.

Con información de Canal 12