“La Argentina tiene activo muy importante que no está siendo aprovechado que es la enorme capacidad de innovación y desarrollo”, expresó Gabriela Trupia, Subsecretaria de Vinculación Tecnológica de la UTN Regional Delta, durante el Seminario Zárate Campana, 2022.
Por Ariel Armero
Gabriela Trupia participó en el panel “Innovación tecnológica y producción” junto a Fernando Mascarenhas, consultor de Tecno Logísti-K. Ambos disertaron acerca de los desafíos que las innovaciones tecnológicas traen al mundo del trabajo y las vinculaciones con el mundo académico.
Trupia se estaba refiriendo al informe de la Organización Mundial de Propiedad Intelectual (OMPI) que analiza el rol que cumple en la innovación en los países. De 132 economías mundiales, Argentina se ubica en el número 73 de acuerdo a siete indicadores que tienen que ver con el capital humano, la estabilidad y fortaleza de instituciones, los niveles de educación, la difusión del conocimiento, los aspectos de salida. Lo que destaca Gabriela Trupia es que entre todos los aspectos analizados, Argentina se destaca por estar en un valor muy alto en lo que refiere a la capacidad investigación y desarrollo (i+d).
“Tenemos capacidad de investigación y desarrollo, generamos conocimiento nuevo, podemos hacer servicios de alto nivel, ese capital que lo tenemos principalmente en las universidades tiene que ser articulado con las empresas”, expresó la Subsecretaria de Vinculación Tecnológica de la UTN Regional Delta al referirse que existe una falta de articulación entre las empresas, principalmente las pymes y las universidades.
“Todavía a las pymes, particularmente, le falta transformar los problemas en demandas de conocimiento. Es un problema desde las universidades también, que generamos mucho conocimiento pero muchas veces no sabemos cómo transferirlo” afirmó.
La observación es pertinente, ya que como lo plantea Trupia, todos los debates que hoy se están dando en el mundo empresarial referidos a la innovación tecnológica pasaron previamente por estudios e investigaciones de universidades. En nuestro país, las universidades públicas son las que cobran mayor relevancia en el tema, ya que la mayoría de las inversiones en investigación y desarrollo y de las publicaciones científicas se dan en ellas.
Entre una de las innovaciones que más viene revolucionando el mundo del trabajo se encuentra la introducción de inteligencia artificial. Fernando Mascarenhas, consultor de Tecno Logísti-K, en su exposición contó que según la Universidad de Oxford, para el año 2030 el 47% de las profesiones que hoy conocemos van a desaparecer y se van a crear nuevas. “Tenemos que estar preparados para eso”, explicó.
“La inteligencia artificial está generando una profunda y generalizada automatización de todos los medios de producción, apuntando a mejorar los procesos para reducir costos, por lo cual va a tener un impacto en todas las industrias”, manifestó Mascarenhas, cuya exposición se centró en mostrar cómo opera esta tecnología en la industria de la logística, principalmente los puertos, algo que ya se está dando en puertos como Rotterdam y Long Beach.
“Si tenemos un hardware, como un camión o grúa y le agregamos un software de inteligencia artificial, vamos a tener una máquina que tiene capacidad de manejarse sola y de tomar decisiones según lo que fue aprendiendo del proceso”, explicó el especialista de Tecno Logísti-K.
Frente a la pregunta del moderador, Juan Carlos Venesia, acerca de quién controla y cómo se regulan esos datos que circulan de los cuales se nutren las tecnologías de inteligencia artificial, Mascarenhas admitió que, si bien existen regulaciones que buscan promover principios éticos y códigos para los desarrolladores así como también tecnologías de blockchain, se trata de un debate ya que “cualquier tecnología usada para los fines equivocados puede ser un problema.”
En un sentido similar, Gabriela Trupia habló acerca de la finalidad de la innovación, el para qué y dijo que el planteo de las universidades es poder promover “un país que sea más innovador, que tenga un mercado más diversificado, que pueda implementar las tecnologías que estamos viendo para ser más sustentable y más inclusivo, ese el rol que debiera tener la innovación: mejorar la competitividad y la productividad pero que eso haga que todos nosotros vivamos con mayor calidad de vida”.