En un reciente webinar organizado por GlobalPorts, titulado «El Buque Tai An y la Pesca Ilegal de la Merluza Negra», expertos en el sector pesquero se reunieron para discutir los desafíos y las repercusiones de la pesca ilegal, con especial enfoque en el caso del Buque Tai An y su impacto en la pesquería de la merluza negra. 

Por Violeta García

El evento fue liderado por Giuliano Falconnat, consultor en temas de puertos y pesca, y por Irene Ascoli, Gerente de Relaciones Institucionales en GlobalPorts. Contó con la participación de figuras clave del sector, incluyendo a Agustín De La Fuente, presidente de la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (CAPIP), César Lerena, especialista en temas del Atlántico Sur y pesca, y Otto Wöhler, exdirector del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP). Los participantes compartieron sus valiosos conocimientos sobre las implicancias ambientales y económicas de la pesca ilegal, el estado de los permisos de pesca y la situación actual de la industria pesquera.

Con esta iniciativa GlobalPorts busca aportar claridad y profundidad al debate que tomo relevancia mediática, sobre el buque Tai An. En este sentido, al iniciar, Irene Ascoli comentó una información errónea que se afirmó en algunos medios, aclarando que, aunque el propietario es un empresario chino radicado en Ushuaia, el buque opera bajo bandera argentina, esclareciendo la percepción de que se trataba de una embarcación extranjera. Esta aclaración sirvió como punto de partida para una discusión más amplia sobre la pesca, las zonas protegidas, las cuotas de pesca  y los mecanismos de control. 

Giuliano Falconnat enfatizó la necesidad de colocar a la industria pesquera en el centro del debate público, entendiendo sus dinámicas, especialmente frente a las propuestas del gobierno nacional de derogar la Ley Federal de Pesca. Falconnat también instó a la reflexión sobre el impacto ambiental de la pesca y la importancia de desarrollar prácticas de manejo sustentable.

Los expertos presentes desmitificaron varios conceptos erróneos sobre el sector, subrayando la importancia de los programas de investigación liderados por el INIDEP. Agustín De La Fuente destacó la transición de la industria hacia un enfoque más sostenible que incluye autorizaciones de captura y cuotas individuales transferibles y sustituyó lo que antiguamente se conocía como la «pesca olímpica». Además, instó a las autoridades a considerar la pesca desde perspectivas ambientales y económicas, proponiendo declarar una emergencia pesquera para promover un debate constructivo sobre políticas pesqueras.

Queremos resaltar que la pesca es una actividad de riesgo y que necesitamos poner en valor todos nuestros recursos nuevamente. Debemos revisar lo que no funciona, cuando se discutió la modificación de la Ley Federal de Pesca, nosotros vimos que era una oportunidad para reunimos con todos los bloques parlamentarios, era una forma también conocieran al sector pesquero” afirmó De La Fuente.

Quiero invitar a las autoridades provinciales de la Patagonia, a los municipios, a los consejos deliberantes a declarar la emergencia pesquera, porque necesitamos que hoy se empiece a discutir una política pesquera que pueda estudiarse, que sea más analizada, y que pueda llegar a dar ese valor agregado al sector pesquero”  expresó el presidente de CAPIP.

En relación a la pesca de la merluza negra, se reveló que el buque Tai An capturó una cantidad de ejemplares significativamente superior al límite permitido por marea, representando un considerable impacto económico. Sin embargo, Otto Wöhler explicó que este exceso no compromete críticamente al recurso pesquero, destacando la regulación argentina enfocada en prevenir la sobrepesca de juveniles y favorecer la captura de ejemplares adultos.

Los buques que tienen cuota de captura y pueden pescar la merluza negra de forma legal, navegan a más de 800 metros de profundidad donde van a obtener en su gran mayoría ejemplares adultos” explicó Wöhler.

Además Wöhler aclaró la información difundida por algunos medios sobre la pesca en zonas protegidas, del buque Tai An: “ Muchas de las regulaciones que se impusieron en la pesquería argentina están justamente destinadas a evitar la captura excesiva de juveniles y basarse principalmente en la explotación de los adultos. Dada su distribución en aguas menos profundas, los juveniles son objeto de capturas en otras pesquerías. Se capturan como bycatch. (…) El Tai An,  pescó a 450mts de profundidad y obtuvo un 55% de juveniles en esta marea. Entonces, no es que se violó el área de veda, sino que no se puede dentro del área de veda pescar a menos de 800mts de profundidad de manera dirigida” 

A través de su experiencia, el experto señaló la importancia de entender los detalles específicos de la pesquería de merluza negra, destacando que es uno de los peces más valiosos del mar argentino, con un precio de exportación que oscila entre los 25 y 30 dólares por kilo.

César Lerena arrojó luz sobre los complejos desafíos regulatorios, de supervisión y control frente a la pesca ilegal, abogando por una reforma legislativa y una reestructuración organizativa para asegurar la sostenibilidad futura de la industria pesquera argentina.

Yo no alcanzo a entender por qué la Cancillería tiene que estar presente en el Consejo Federal Pesquero, sinceramente. Más allá de que podría ocuparse los diplomáticos en atender la cuestión de la pesca en Malvinas o en el Tratado Antártico. No entiendo por qué el Consejo Federal Pesquero debe tener un integrante de la Cancillería. Pero así todo, un funcionario de cuarta categoría frena un procedimiento del director de Fiscalización de Pesca” expreso Lerena

Refiriéndose al caso del buque Tai An, Lerena se refirió a la falta de acción inmediata por parte de las autoridades al ser informadas de estas violaciones. “Este caso pone en evidencia la desconexión entre las autoridades de control y la necesidad urgente de mejorar los mecanismos de supervisión y fiscalización en el sector” aseguró.

Para concluir, Irene Ascoli agradeció a la comunidad de GlobalPorts por su participación y anticipó futuros encuentros para seguir abordando temas relevantes para el sector.

Este encuentro subraya la importancia de abordar la pesca no solo como un asunto de legalidad sino también de sostenibilidad y responsabilidad ambiental, promoviendo un diálogo informado entre expertos, reguladores y la comunidad en general.