Filtraciones en el muro de contención de una antigua planta de fosfato hacen temer que podría suceder un colapso estructural en cualquier momento.

Las autoridades del estado de Florida en Estados Unidos están trabajando contrarreloj para evitar una inminente catástrofe ambiental en la localidad de Piney Point, en la bahía de Tampa, condado de Manatee.

El sábado, el gobernador Ron DeSantis declaró el estado de emergencia en la ciudad de Tampa, unos 450 kilómetros al noroeste de Miami, ante el inminente colapso de un estanque de residuos químicos de una vieja planta de fosfato para la producción de fertilizantes agrícolas.

Se ordenó a cientos de familias evacuar la zona.  Las imágenes aéreas mostradas en la televisión local muestran agua saliendo de filtraciones en el muro de contención del estanque.

La fuga se descubrió hace aproximadamente una semana, explica CNN, y los residentes de área fueron evacuados el jueves, mientras las autoridades advirtieron que podría suceder un colapso estructural en cualquier momento.

La planta de fosfatos pertenece a la compañía HRK Holdings y está fuera de funcionamiento desde 2001, pero sus desechos siguen en varios estanques de retención alrededor de las instalaciones. En los últimos días, estos presentaron grietas crecientes en sus estructuras.

“Lo que estamos enfrentando ahora es tratar de prevenir y responder, si es necesario, a una situación de inundación catastrófica real. El objetivo es garantizar la integridad del sistema de pilas lo más rápido posible para minimizar los impactos a los residentes locales y evitar una descarga descontrolada.” dijo DeSantis.

Las “pilas” a las que se refiere el gobernador de Florida son las pilas de fosfoyeso, desechos radiactivos que se crean durante la producción de fertilizanes y la extracción de rocas fosfatadas.

La presidenta de la Comisión del Condado de Manatee, Vanessa Baugh, de todos modos, aseguró a los clientes de servicios públicos del condado de Manatee que “su agua potable es completamente segura para beber”: “El sistema de distribución de agua es un sistema cerrado y no hay ninguna forma de que entre el agua de la inundación”, dijo. “Tampoco existe una amenaza para nuestra principal fuente de agua potable, el lago Manatee.”

De acuerdo con el Departamento de Protección Medioambiental de Florida, el líquido del estanque sur de la planta de fosfatos es agua de mar del drenaje de un puerto cercano mezclada con agua del proceso industrial de la planta y agua de lluvia.

Este agua, aseguraron, “cumple con los niveles de calidad del agua para las aguas marinas”, pero las organizaciones socioambientales advirtieron que debido a los altos niveles de fósforo y nitrógeno, las algas marinas cercerán muy rápido con un aporte extraordinario de esos elementos, lo que podría generar una “marea roja” que afecte la vida de los peces tanto como el turismo. Fuente: Urgente 24