Buques y aviones apuntan a nuevas tecnologías para reducir las emisiones. Los casos de Mediterranean Shipping, DB Schenker, Airbus y LAN.

Por Agustín Barletti

Es cada vez más fuerte la presión sobre los grandes transportistas para que aborden las emisiones de carbono en toda su cadena de suministro. Desde el sector marítimo y aéreo tomaron nota y viene trabajando al respecto.

Mediterranean Shipping Company (MSC), una de las navieras más grandes del mundo, trabaja en un programa de reducción de carbono disponible para los clientes transportistas de DB Schenker que se traduce en una reducción inmediata de las emisiones. Se trata de un interesante modelo que podría ser imitado por otros actores del rubro.

DB Schenker se comprometió a la compra de 12.000 toneladas métricas de un biocombustible de segunda generación que utilizarán los portacontenedores de MSC. El mismo se mezclará entre un 20% y un 30%, lo que dará como resultado aproximadamente 50.000 toneladas métricas de biocombustible mezclado que se utilizará en toda la flota de MSC. 

Se estima que esta medida equivale al transporte de unos 30.000 Teus (unidad equivalente a un contenedor de 20 pies) con emisiones netas de CO2 nulas, dependiendo de cómo se utilice el combustible durante la navegación.

La constructora Airbus, por su parte, recibido la aprobación de la iniciativa Objetivos Basados en Ciencia (SBTi por sus siglas en inglés) para sus objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero a corto plazo.

En 2022, el consorcio europeo se comprometió oficialmente a definir objetivos con base científica para la totalidad de sus emisiones y presentó objetivos a corto plazo que ahora han sido evaluados y validados de forma independiente por la SBTi.

Como parte de su compromiso, Airbus pretende reducir sus emisiones industriales de Alcance 1 y Alcance 2 hasta un 63% para el año 2030, en línea con una ruta de 1.5°C.

La empresa también se comprometió a reducir en un 46% la intensidad de las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por sus aviones comerciales en servicio (Alcance 3 – Uso del producto vendido) para 2035.

Ambos objetivos se basan en el año 2015 como referencia y están en consonancia con los objetivos del Acuerdo de París.

“En Airbus estamos comprometidos con liderar la descarbonización del sector aeroespacial. La evaluación y la validación independiente del SBTi demuestran nuestra voluntad de definir objetivos climáticos significativos alineados con la ciencia. Junto con nuestros socios y clientes, estamos decididos a alcanzar estos objetivos e invertir en las soluciones que ayudarán a descarbonizar nuestra industria y garantizar que la aviación pueda seguir desempeñando su valioso papel en la sociedad”, dijo Guillaume Faury, CEO de Airbus.

Creada en 2015, la iniciativa Objetivos Basados en Ciencia (SBTi) ayuda a las empresas a fijar objetivos de reducción de emisiones en consonancia con la ciencia climática y los objetivos del Acuerdo de París. La SBTi es una asociación entre CDP, el Pacto Mundial de las Naciones Unidas, el Instituto de Recursos Mundiales (WRI) y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF). Más de 4.000 empresas de todo el mundo se han sumado a la iniciativa desde su creación.

La nave, partió de desde el Aeropuerto de Zaragoza, España, hacia Norteamérica y responde al compromiso del grupo de convertirse en carbono neutral al 2050.

El SAF es un tipo de combustible que proviene de materias primas alternativas como residuos, grasas y aceites, entre otros, las cuales son co-procesadas junto con el convencional para producir un combustible sintético bajo en CO2. En este caso, se emplearon 30.000 litros de SAF co-procesado realizado a partir de aceite de cocina usado, siendo la otra proporción del combustible jet fuel tradicional.

Actualmente se permite hasta un 5% de materia prima sostenible dentro del co-procesamiento de este SAF, al que se le atribuye un ahorro de alrededor del 80% de emisiones de carbono a lo largo de su ciclo de vida, en comparación con el combustible de aviación convencional al que sustituye. 

En mayo de 2021, el grupo LATAM lanzó su renovada estrategia de sostenibilidad en la que estableció desafiantes metas: Lograr la carbono neutralidad al 2050, eliminar los plásticos de un solo uso en toda su operación en 2023; y convertirse en un grupo cero residuos a relleno sanitario en 2027.

Fuente: Transport & Cargo, El Cronista