Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos, el complejo oleaginoso-cerealero, incluyendo al biodiésel y sus derivados, aportó el año pasado el 48% del total de las exportaciones de la Argentina.

De acuerdo con los números difundidos este miércoles por la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), las empresas del sector agroexportador liquidaron el mes pasado US$ 3.049,78 millones, que significaron una marca histórica.

De este modo, el ingreso de divisas acumulado de la agroexportación en los primeros ocho meses del año alcanzó los US$ 23.229.238.627.

«El monto de agosto pasado resulta récord para ese mes en las estadísticas desde comienzos de este siglo y en toda la serie histórica», precisaron en un comunicado Ciara y CEC, entidades que representan el 48% de las exportaciones argentinas.

Vale señalar que lo liquidado en agosto significó un 74,97% superior a lo registrado un año atrás, pero fue un 13,35% menor a lo ingresado en julio último. En tanto, el ingreso de divisas de los primeros ocho meses del año representó un crecimiento del 74% respecto del mismo período de 2020, y récord absoluto para el mismo período desde comienzos de este siglo.

«Esos resultados se alcanzaron por los significativos esfuerzos logísticos a los que obligó la histórica baja del río Paraná. No obstante, los precios internacionales de los commodities resultaron un atractivo que le dieron fluidez a las ventas de los productores», afirmaron las entidades.

La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) destacó la semana pasada que las exportaciones argentinas de maíz se ubicaron en niveles récords transcurridos seis meses de la campaña comercial al superar los 34 millones de toneladas, según las Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE) aprobadas hasta el momento.

En rigor, la BCR detalló que aún restan 4 millones de toneladas para que la campaña actual supere el total declarado en el año comercial 18/19, el de mayor declaración de la historia, con más de 38,1 millones de toneladas al finalizar dicha campaña. «Este contexto exportador favorable no sería posible de no ser por un buen panorama productivo. En este sentido, la campaña de maíz 2020/21 mostró un crecimiento de área sembrada en torno al 5%, lo que también viene empujando un alza del consumo interno del grano amarillo», explicó.

Por el lado de la soja, la campaña actual acumuló 25,3 millones de toneladas para todo el complejo, levemente por encima de los niveles del año pasado, que acumulaba a esta altura 25 millones de toneladas.

«Detrás de estos números debemos destacar la mejora en las perspectivas de la industria procesadora», subrayó la BCR, que precisó que las DJVE de subproductos y de aceite de soja totalizaron 15,3 y 3 millones de toneladas respectivamente, «mostrando alzas interanuales del 9% y 4%».

El complejo oleaginoso-cerealero, incluyendo al biodiésel y sus derivados, aportó el año pasado el 48% del total de las exportaciones de la Argentina, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

El principal producto de exportación del país es la harina de soja (14,2% del total), que es un subproducto industrializado generado por este complejo agroindustrial, que tiene actualmente una elevada capacidad ociosa cercana al 50%. El segundo producto más exportado el año pasado, de acuerdo con el Indec, fue el maíz (11 %) y el tercero fue el aceite de soja (6,9 %).

Según datos publicados por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), se prevé que la Argentina mantenga el primer puesto en exportaciones 2020/21 de aceite y harina de soja. Sólo el complejo soja representó el 27% de las exportaciones totales de la Argentina del año pasado. Fuente: BCR News