A.P. Moller-Maersk (Maersk), la empresa líder mundial en transporte y logística de contenedores, ha anunciado una significativa reducción de su fuerza laboral global como parte de un amplio programa de medidas de contención de costos y eficiencia operativa. Esta decisión sigue a un declive en ingresos y ganancias reportado para el tercer trimestre (Q3) de 2023.
En el Q3, Maersk experimentó un descenso en la rentabilidad, con ganancias de US$1.880 millones, lo que llevó a una revisión a la baja de sus expectativas de EBITDA. A pesar de las rigurosas medidas de contención de costos ya implementadas a lo largo del año, que redujeron la plantilla de 110.000 a 103.500 empleados, la compañía se enfrenta a una presión continuada debido a la caída de tarifas y el aumento en la capacidad de su flota.
Ante un escenario de precios adverso y un entorno de mercado desafiante, Maersk intensifica estas medidas con un nuevo ajuste laboral. En los próximos meses, se espera la eliminación de hasta 2.500 empleos, con más recortes planeados para 2024, reduciendo la plantilla a menos de 100.000 empleados. Se estima que el costo de reestructuración ascenderá a unos US$350 millones, superando la cifra previamente anunciada en febrero de US$150 millones.
Con el objetivo de reducir los costos de ventas, generales y administrativos (SG&A) en US$600 millones para 2024, Maersk también está ajustando su gasto de capital (CAPEX) para los años 2023 y 2024 y evalúa continuar con el programa de recompra de acciones en 2024.
Los resultados de Q3 reflejan la dura realidad del mercado con tarifas significativamente inferiores a las del pico de 2022. La división Ocean de Maersk ha registrado números rojos por primera vez en años, con un EBIT de US$-27 millones, una cifra distante de los US$8.700 millones del mismo periodo del año anterior.
En palabras de Vincent Clerc, CEO de Maersk: “Nuestra industria se enfrenta a una nueva normalidad con una demanda moderada, precios alineados con niveles históricos y presión inflacionaria sobre nuestros costos. Frente a los tiempos difíciles que se avecinan, estamos acelerando diversas medidas para salvaguardar nuestro desempeño financiero.”
Maersk ajusta además sus expectativas para el crecimiento global del volumen de contenedores, previendo ahora un rango entre -2% y -0,5%, una mejora comparada con las proyecciones anteriores de -4% a -1%. Estos cambios forman parte de las medidas decisivas que la compañía está tomando para mantener su liderazgo y rentabilidad en un entorno económico volátil.
Drewry, una consultora respetada en el sector marítimo, prevé que las navieras enfrentarán una pérdida combinada de US$15 mil millones en 2024, con una alineación entre el crecimiento de la flota y la demanda que no se espera hasta 2026.
Maersk sigue comprometida con sus clientes, empleados y accionistas para navegar con éxito a través de estos tiempos desafiantes y emergiendo como una organización más ágil y eficiente.
