Redacción Globalports

El Clúster de Energía Mar del Plata continúa posicionándose como un espacio de articulación entre el sector público y privado y como un actor estratégico en el trabajo que viene desarrollándose para visibilizar el potencial y la oportunidad que representa la exploración offshore para la ciudad costera, la provincia y nuestro país.

Durante el panel  “El proyecto de Offshore en el Mar Argentino” realizado en la Expo AOG Patagonia 2022 diversos representantes del sector debatieron acerca de las “bondades” de este tipo de desarrollos para la Argentina, así como también del alto riesgo que implican las operaciones en alta mar. 

Sandra Cipolla, socia fundadora del Clúster de Energía MdP y presidenta de SPI Astilleros, junto a la presidenta de Equinor Argentina, Nidia Álvarez Crogh y la Gerenta Ejecutiva de Exploración de YPF, Fernanda Raggio abordaron los detalles de los proyectos de exploración en la Cuenca Norte del Mar Argentino, las perspectivas y oportunidades. 

Además analizaron la capacidad productiva que tiene Mar del Plata para atender el desarrollo de la industria offshore y las iniciativas a continuar trabajando – en forma conjunta – para visibilizar todo el potencial de la industria del gas y el petróleo. 

Por su parte, Marcelo Guiscardo, presidente de la Fundación Clúster de Energía Mar del Plata, y –a través de videollamada desde Houston- Diego Lamacchia, VP de Operaciones de Leviticus Subsea coincidieron en que se trata de un proyecto que se comparte desde lo político y que es una gran oportunidad para el país por la cantidad de barriles de petróleo que se podrían producir, incluso, superando la producción actual de Vaca Muerta. 

Mientras que se espera que ésta llegue -en 10 años- a un millón de barriles por día, el Offshore tendría el mismo tiempo de potencialidad, pero con riesgos totalmente diferentes, siendo más eficiente ya que ocho pozos pueden producir 80mil barriles por día. 

Este es un proyecto que no tiene grietas”, definió Guiscardo, remarcando que durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner fue quien extendió las áreas, ampliando la cuenca del Mar Argentino, en 2013, de las 200 millas marítimas a las 300, y esto permitió licitar las nuevas áreas. Durante el gobierno de Mauricio Macri, se licitaron esos bloques y ya con el gobierno actual se continuó con los procesos para brindar los permisos, sobre todo, de obtener la tan deseada “licencia social”, con los pasos establecidos como las Audiencias Públicas. “La sociedad tiene que decidir qué es lo que quiere hacer”, dijo. 

Cabe mencionar que en términos de cifras, el llamado a licitación para la exploración implica una superficie ofrecida de 225.000 km2; y una adjudicada de 94.834 km2 (un 42%). Las áreas ofrecidas son 38 y las adjudicadas, 18 (47%); y la inversión comprometida -según datos de YPF- en total en las 18 áreas, es de 720 millones de dólares. Asimismo, intervendrían en el proyecto grandes empresas del sector tales como Enap, Eni, Equinor, ExxonMobil, Pan American Energy, Pluspetrol, Sipetrol, Shell, Tecpetrol, Total Energies, Wintershall, YPF, Ullow Oil; a empresas de servicios como Baker Hughes, Halliburton, Weatherford, Schlumberger; y la pata tecnológica del Conicet, el centro tecnológico argentino que engloba también a otras organizaciones. 

Otro de los puntos salientes de la conferencia fue la seguridad de las operaciones y en la necesidad de hacer un balance entre riesgos y beneficios. En ese sentido, Lamacchia dijo que en el ciclo de vida del proyecto, el diseño de seguridad se aplica durante toda la etapa del proyecto, y que se deben tomar medidas precautorias para que la operación sea lo más segura posible.


Una de las opciones que consideraron, para garantizar la viabilidad del proyecto de manera eficaz y segura, es la creación de un Centro Tecnológico del Offshore, – que aún no existe en Argentina- con la intención es que se instale en Mar del Plata. Uno de los atractivos que ofrece la ciudad para dicho proyecto es el hecho de que ya cuenta con un puerto en condiciones, con diques secos para reparar barcos, y la presencia de la Prefectura Argentina con todo su equipamiento.