Un proyecto de ley busca bajar la carga impositiva de los armadores, la apertura de nuevos mercados y el desarrollo de la industria naval
E l diputado nacional de Juntos por el Cambio Héctor Stefani presentó un proyecto de ley para instalar un segundo registro de buques de comercio nacional e internacional en el país con asiento en Tierra del Fuego, donde las embarcaciones gozarán de los beneficios del régimen aduanero especial de la provincia. El fin de esta ley es acrecentar el número de buques bajo bandera nacional y acceder a un mercado de millones de dólares, que generará puestos de trabajo, infraestructura y desarrollo para la provincia y la nación.
“Tuvimos reuniones virtuales previas para obtenerla opinión de los representantes de la Federación de la Industria Naval Argentina (FINA), la Federación de Empresas Navieras Argentinas (FENA) y el Centro de Patrones Fluviales y Oficiales de Pesca y Cabotaje Marítimo. De todos modos, estamos abiertos a cualquier modificación. En la Argentina no tenemos transporte marítimo y las cargas llegan a Ushuaia tras recorrer 3.200 kilómetros en camión, cuando todos saben que después de los 600 kilómetros este modo es ineficiente”, dijo a Transport & Cargo Héctor Stefani.
El Registro Argentino de Buques Internacional y Nacional de Transporte (RABINT), con sede en el puerto de Ushuaia, busca una mayor competitividad de las empresas navieras argentinas a través de una serie de medidas equiparables a las existentes en registros similares de países de la Unión Europea, y permite la competencia con las banderas de conveniencia en los tráficos nacionales, regionales e internacionales. Esta iniciativa apunta a revertir el actual sistema de incentivos y de carga impositiva y fiscal para aumentar la flota argentina y reducir los costos logísticos, ya que el único impuesto que pagarían los barcos sería acorde al tonelaje de carga.
Tierra del Fuego es un área aduanera especial y cuenta con beneficios tributarios y exenciones impositivas que benefician el desarrollo de una segunda bandera nacional. Desde el equipo de trabajo de Jorge Metz, Gustavo Deleersnyder, Ignacio Penco y José Vieitez Otero que participó en este proyecto, señalaron que “el n es mejorar la realidad de la flota mercante nacional, permitiéndole salir a competir en igualdad de condiciones con las banderas de registros abiertos, protegiendo el trabajo y la inversión argentina”.
Todos los buques se encuentran registrados bajo la legislación de bandera de un determinado país. Inclusive muchos países ofrecen banderas de conveniencia donde buques de otras naciones pueden inscribirse para percibir beneficios tributarios. Ante esta situación, estados como España y Alemania, por ejemplo, optaron por crear segundos registros para competir con las banderas de conveniencia y evitar que su flota disminuya. La iniciativa del diputado fueguino apunta al desarrollo de un segundo registro con los beneficios y excepciones que goza la provincia de Tierra del Fuego. Según datos del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales de Pesca y de Cabotaje Marítimo, la Argentina paga entre u$s 5000 millones y u$s 6000 millones al año a empresas extranjeras para transportar su carga al mundo.
“Tal como hicieron países como Alemania, Francia, Estados Unidos o Brasil, la implementación de una segunda bandera en Tierra del Fuego, con menos cargas impositivas, hará crecer exponencialmente el número de buques registrados, generando millones de dólares de ingresos. El proyecto Bandera Fueguina Azul y Bronce procura las condiciones necesarias para velar por el desarrollo de la industria naval argentina y del comercio marítimo y fluvial. La Argentina padece de problemas estructurales y sistemáticos en materia naval y mercantil y este es un paso fundamental para corregirlos y recuperarla actividad naviera. Supimos serla cuarta flota más grande del mundo y hoy estamos lejos de esa realidad”, armó Stefani, quien además se desempeñó como presidente del Puerto de Ushuaia. En 2011, el 84% de las cargas del país se transportaron en camión, el 14,4% en tren, y el 1,5% en barcaza; mientras que en países del norte de Europa la proporción fue para el mismo año 40% por ruta, 50% por vía férrea y 10% por hidrovía.
“La Argentina demanda una mejora en su eficiencia logística. En el comercio exterior casi el 100% de los buques son de bandera extranjera mientras que en el comercio interior solo un 1%, de los buques utiliza el pabellón nacional. El 98% del transporte que hace uso de la hidrovía se realiza con buques de bandera de los países limítrofes”, destacó el legislador. Stefani adelantó que el proyecto ya cuenta con el apoyo de 30 diputados nacionales, tanto del oficialismo como de sectores de la oposición. “Una posibilidad que se baraja es que el registro sea una sub agrupación del Registro Nacional de Buques de la Prefectura Naval Argentina. Esto podría descomprimir y facilitarla concreción del proyecto ante la complejidad que tiene el armado e implementación de un nuevo registro”, destacó el parlamentario. Fuente: Transport & Cargo