En las últimas 72 horas escalaron los ataques de los rebeldes hutíes contra embarcaciones israelíes, británicas y estadounidenses navegando entre los mares Rojo, Arábigo y el océano Índico. Este incremento en la hostilidad ha llevado a las navieras a desviar sus rutas logísticas en la búsqueda de una navegación más segura, aunque implique mayor tiempo y costos, lo que esta afectando el comercio internacional.
Estos ataques, dirigidos a cinco buques identificados específicamente por los rebeldes, fueron ejecutados con misiles y drones, según declaraciones del portavoz hutí, Yahya Sarea.
El portavoz afirmó que los ataques lograron sus objetivos con éxito, destacando la operación contra el ‘Hope Island’, un buque que navega bajo bandera de las Islas Marshall pero identificado como británico por los hutíes. También se mencionaron ataques contra dos embarcaciones con bandera panameña señaladas como israelíes, y varias fragatas estadounidenses en el mar Rojo.
Esta serie de ataques, que incluyó el uso de misiles balísticos y de crucero, se llevó a cabo en el contexto de la guerra en la Franja de Gaza, que cumple seis meses. Sarea subrayó la intención de los hutíes de impedir la navegación israelí en estas aguas estratégicas hasta que cese la agresión y se levante el asedio a Gaza.
Hasta el momento, no ha trascendido información sobre posibles daños o víctimas por parte de los buques afectados, y no ha habido pronunciamientos oficiales por parte de Israel, Estados Unidos ni el Reino Unido respecto a estos ataques. Sin embargo, la agencia británica de Operaciones de Comercio Marítimo (UKMTO) alertó de ataques con misiles en la región sin registrar víctimas ni daños significativos.
Estos ataques se suman a una serie de acciones reivindicadas por los hutíes en meses recientes, incluyendo cerca de 90 ataques contra barcos dirigidos a puertos israelíes, según declaraciones del líder hutí, Abdulmalek al Huti. Este incremento en la hostilidad ha llevado a grandes navieras a desviar sus rutas, afectando significativamente al comercio internacional.
La situación en las aguas estratégicas del mar Rojo y adyacentes sigue siendo volátil, con implicaciones significativas para la seguridad marítima internacional y el comercio global.
Las autoridades competentes y la comunidad internacional mantienen su atención en el desarrollo de estos acontecimientos, que subrayan la complejidad del conflicto en la región y la necesidad de una solución diplomática.
Con información de EFE y Europa Press
