Detrás del espectacular aumento del valor de los fletes marítimos está la llamada “crisis de los contenedores“, es decir, una insólita escasez de espacio disponible para transportar los productos de Asia a Occidente. El precio de un contenedor de China a Argentina ha subido al doble pero el temor de los importadores es que a fin de año el valor suba tres o cuatro veces.

La escasez global de contenedores empleados para la transportación de materia prima y productos terminados, disparará los costos de los fletes marítimos hasta en un 300% en junio de este año, en comparación con diciembre de 2019 (periodo inmediato previo a la pandemia por COVID-19), de acuerdo con el análisis Global Shipping Crisis, The detrimental impact of the rising tide of freight costs on SMBs, de Drip Capital.

El bloqueo del canal de Suez, en marzo de 2021, puso de relieve varios problemas que enfrenta la industria del transporte marítimo y la logística. Sin embargo, Drip Capital observó que este sector ha atravesado una crisis más profunda y generalizada desde el inicio de la pandemia por la COVID-19 y la contracción económica resultante.

A medida que China comenzó a recuperarse del virus, se saturó de pedidos de los mercados de América del Norte y Europa, y registró un crecimiento interanual del 3.5% en abril de 2020.

El costo de importar productos desde China al resto del mundo se ha disparado a niveles impensables.Si antes pagabas US$2.000 por mover un contenedor desde China a la costa oeste de Estados Unidos, ahora tienes que pagar US$20.000“, explica Teddy Heinsen, presidente de la Asociación de Navieros de República Dominicana.

China ha comenzado a intensificar su programa global de reposicionamiento de contenedores vacíos. Según datos de S&P, en junio de este año, el volumen total de contenedores vacíos de unidades equivalentes a 20 pies (TEU) enviados desde Estados Unidos a China aumentó un 188% interanual y un 245% interanual en junio y julio, respectivamente.

El mayor aumento de precio se produjo en la ruta marítima que une Shanghái y Rotterdam, en los Países Bajos, donde el costo subió 659%.

En Latinoamérica la situación varía según cada país y los precios cambian sustancialmente cuando se trata de una empresa pequeña con poco poder de negociación o un gigante que consigue tarifas por volumen. Por ejemplo, el costo del flete de un contenedor entre Shanghái y América del Sur antes de la pandemia era de unos US$2.000 promedio. Ahora, sin embargo, ha subido a más de US$7.000, según estimaciones hechas por especialistas del Banco Interamericano de Desarrollo, BID.

Este análisis interno de Drip Capital resaltó que las pequeñas y medianas empresas (Pymes) de todo el mundo contribuyen con más del 25% del comercio marítimo. De acuerdo con datos de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), alrededor del 80% del comercio mundial por volumen y más del 70% del comercio internacional por valor se realiza a través de la vía marítima.