Las recientes lluvias en el sur de Brasil han llevado a un impresionante incremento del caudal en el río Paraná, llevaron a las autoridades a la apertura de las compuertas de Yacyretá.

En una medida preventiva y como parte de su protocolo de manejo hidrológico, la Central Hidroeléctrica Yacyretá procedió a la apertura de las compuertas del Vertedero Brazo Principal ante el significativo incremento del caudal del río Paraná, una decisión influenciada por las recientes precipitaciones intensas en el sur de Brasil.

Los expertos del Departamento Técnico de la Entidad Binacional han indicado que la acción de liberar agua es una respuesta necesaria al excedente hídrico que supera la capacidad de turbinado del embalse. Según los análisis, la crecida actual del río Paraná presenta una magnitud considerable que justifica la erogación del exceso de agua mediante los vertederos.

Esta es una operación normal, que se realiza de forma escalonada para asegurar el menor impacto posible en la región,” señalaron fuentes de la central hidroeléctrica, subrayando la sincronización de los caudales con las operaciones de las centrales aguas arriba y las previsiones meteorológicas.

Las autoridades han adelantado que el caudal afluente podría fluctuar entre 35.000 y 40.000 metros cúbicos por segundo en los próximos días. En paralelo, el Centro de Operaciones de Emergencia en Ayolas se mantiene activo, brindando asistencia necesaria ante la crecida.

La ciudad de Paraná ya está experimentando las repercusiones, con el río registrando una altura de 3.17 metros y en tendencia creciente, que podría alcanzar los 3,56 metros según proyecciones del Instituto Nacional del Agua (INA) para la primera semana de noviembre.

Además, se anticipa un evento significativo de precipitaciones para la región de Iguazú y el sur de Brasil que podría exacerbar la situación, con expectativas de una mejora climática recién hacia el fin de semana. Este panorama de lluvias se ha reflejado en una notable crecida del río Iguazú, afectando el acceso turístico a las emblemáticas Cataratas.

Las proyecciones a corto plazo, en el contexto del fenómeno de El Niño, sugieren un trimestre de noviembre 2023 a enero 2024 con altas probabilidades de precipitaciones superiores a las normales.