El Sindicato de Conductores Navales (SICONARA), encabezado por Mariano Vilar, ha tomado medidas drásticas en respuesta a preocupaciones de seguridad marítima y ambiental. En un acto de protesta, el sindicato ha realizado un corte en el acceso a Puerto Rosales tras declararse en “estado de alerta”.

El conflicto surge a raíz de la denuncia del sindicato sobre la asignación de dotaciones que, según Mariano Vilar, “no garantizan la navegación segura y la protección del ambiente”.

El dirigente gremial señaló “la ausencia de seguridad y la asignación de dotaciones incompletas e inadecuadas en buques remolcadores, areneros y lanchas” como consecuencia de “la amplia interpretación”de la Resolución 285/03.

En un documento firmado por Vilar, se advierte que “la flexibilización de la norma arriesga la vida de los tripulantes y el cuidado del ambiente, genera la injustificada pérdida de puestos de trabajo y conlleva el permanente riesgo de contaminación”. El líder sindical enfatizó que la protesta busca visibilizar el reclamo sin afectar otras actividades ni a la población, afirmando: “Cortamos solamente el acceso al puerto, no al balneario”.

Desde SICONARA, se critica el permitir dotaciones de seguridad “incompletas e inadecuadas” en las naves, lo cual, según el sindicato, pone en riesgo tanto la vida de los tripulantes como el medio ambiente. Además, se señala que la flexibilización de la normativa ha llevado a una “injustificada pérdida de puestos de trabajo y al permanente riesgo de contaminación”.

Además, Vilar explicó que “la norma era para buques paleros, embarcaciones menores en el Delta, y se flexibilizó tanto que ya tenemos buques areneros que están tirando más de 600 metros cúbicos de arena por día embarcados con patrón motorista”.

El SICONARA insta a las autoridades a revisar y corregir estas prácticas para garantizar la seguridad y protección ambiental en la navegación. La protesta en Puerto Rosales continuará hasta obtener respuestas satisfactorias.