Un avión de Aerolíneas Argentinas partió ayer hacia China para traer un cargamento de un millón de dosis de vacunas de Sinopharm contra el coronavirus y se espera que regrese al país el jueves por la noche.

El vuelo AR1050 despegó minutos después de las 13:00 desde el Aeropuerto Internacional de Ezeiza y el plan de vuelo incluía una escala en el aeropuerto de Barajas, en Madrid, para recargar combustible, antes de continuar hacia Beijing.
El millón de dosis del lote de Sinopharm permitirá inmunizar a 500 mil argentinos, sumándose así al plan de vacunación que en las mayorías de las provincias se encuentra en el inicio de la etapa 2 (adultos mayores de 70 años) mientras aún se debe terminar la etapa 1 (personal de la salud).
Se tratará de la tercera vacuna contra el Covid que desembarcará a la Argentina, que hasta el momento venía utilizando la rusa Sputnik V y la india Covishield/AstraZeneca.
A través de su cuenta de Twitter, el presidente de la línea de bandera, Pablo Ceriani, explicó que “para el traslado de las vacunas, que en este caso requieren de una refrigeración entre 2 y 8 °C, se utilizarán envirotainers, contenedores especiales con control activo de temperatura”.
“Esto nos permite trasladar un mayor volumen de vacunas en la bodega del avión”, añadió.
Y detalló: “En total serán 48 horas de operación con una escala en Madrid, más el tiempo de carga en el Aeropuerto Internacional de Beijing (PEK). Se estima que el vuelo arribe al Aeropuerto Internacional de Ezeiza, el jueves a las 21:50”.
El Gobierno de Alberto Fernández acordó hace unos días con el laboratorio chino Sinopharm la adquisición de un millón de vacunas, cuya compra se concretó una vez que se obtuvo la aprobación de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).
La administración de Alberto Fernández apuntó a conseguir el primer cargamento de un millón de dosis, pero el acuerdo marco sería para adquirir un total 30 millones, tras extensas negociaciones con el gobierno chino debido al precio que puso a la vacuna, ya que cuesta alrededor de 40 dólares, más que el resto de las opciones en el mercado.
Por su parte, el secretario general del sindicato de Pilotos, Pablo Biró, destacó que “cuando hay cadena de frío de por medio hay mucha tensión” en los vuelos que traen vacunas al país, pero celebró que “en este caso con las vacunas chinas en más cómodo porque ese tema es más amigable”, al necesitar menos frío que otras.
Por otro lado, el gremialista se quejó en declaraciones radiales de que “hay una operatoria para desprestigiar la campaña de vacunación y en eso cae en la volteada Aerolíneas” Argentinas.
“Aerolíneas tiene la flota internacional volando muy poco, han cerrado las operaciones a Roma y a Nueva York”, sostuvo Biró, por lo que consideró que en ese contexto de casi paralización de vuelos comerciales por la pandemia “es una muy buena decisión la que tomó el Estado de tomar la línea de bandera como herramienta” para traer vacunas.