Por Agustín Barletti
A escasos 65 días de finalizar el contrato de concesión, la primera reunión del Consejo Federal Hidrovía trajo más confusión al ya nebuloso panorama.
La frase atribuida a Juan Domingo Perón: «Para que algo no funcione, nada mejor que formar una comisión» sirve para entender lo que se vivió en la primera reunión del Consejo Federal Hidrovía.
Las contradicciones entre varios de sus participantes, mostraron a su vez el mosaico de distintas líneas políticas que forman parte de la coalición gobernante.
El ministro de Transporte Mario Meoni tranquilizó a la agroindustria exportadora al afirmar que la hidrovía no dejará de funcionar ni un minuto, pero el gobernador bonaerense Axel Kicillof, en representación del kirchnerismo más duro, cuestionó la utilización del término hidrovía para referirse a la vía de navegación troncal del Paraná, y aseguró que no habrá renovación de la concesión, aun cuando sabe que es imposible armar los pliegos, licitar y adjudicar en el escaso lapso que resta hasta el próximo 30 de abril, fecha en la que vence el contrato. Minutos después, Pablo Barbieri, de la Unidad Ejecutora Temporal Hidrovía, a cargo del armado de la nueva concesión se refirió a un tiempo mínimo de 180 días hábiles a partir del 30 de abril para llevar a cabo la adjudicación. Este plazo, de cumplirse, nos lleva al 20 de enero de 2022. En consonancia con Meoni y contra lo dicho por el gobernador bonaerense, Barbieri aseguró que en ningún momento se va a cortar la navegabilidad, pese a la finalización de la concesión.
También Meoni adelantó que las licitaciones para la hidrovía y el Canal Magdalena transitarán por separado, pero Kicillof señaló que deberían ir juntas.
«Estamos aquí convocados por lo que el Presidente nos ha pedido desde el primer momento cuando asumimos en el Ministerio, que era la decisión de que la hidrovía del Río Paraná-Paraguay fuera una hidrovía federal», aseguró el titular de la cartera de Transporte. Sin embargo, de las exposiciones de los gobernadores de Santa Fe, Chaco, Misiones y Entre Ríos se observó un cierto recelo y un sentido de pertenencia sobre la vía navegable que no están dispuestos compartir con el gobierno nacional. El mandatario santafecino Omar Perotti lo dejó en claro cuando expresó la necesidad de «descentralizar la hidrovía«. Gustavo Bordet, gobernador de Entre Ríos fue aún más lejos al señalar que «las provincias tienen el dominio de los recursos naturales y que están autorizadas a celebrar convenios» y en ese marco indicó que «sería importante poder tener, como provincias, una Región constituida de hidrovía para tener un status jurídico».
Luego aparecieron las disidencias entre los propios gobernadores. El chaqueño Jorge Capitanich abogó por una mayor integración internacional, mientras que Perotti priorizó lo local y regional. Bordet hizo hincapié en el desarrollo económico de la vía navegable, mientras que su par de Misiones, Oscar Herrera Ahuad, pidió priorizar ante todo la cuestión ambiental.
Los discursos fueron de tono general y abarcaron temas disimiles como transporte fluvial, ferroviario, marina mercante, industria naval, control del narcotráfico, igualdad de género, o contrabando de soja. Se habló mucho de historia, se citó a los caudillos provinciales como Justo José de Urquiza o Estanislao López, y los distintos acuerdos y pactos políticos que desde el 25 de mayo de 1810 a la fecha posibilitaron la organización constitucional del país. Todo muy lindo si la reunión se hubiese desarrollado por ejemplo en el año 2014, y no a escasos días de la finalización de la concesión, es decir cuando se requieren medidas y decisiones urgentes y concretas.
Quien aportó datos precisos fue José Beni, titular de la Unidad Ejecutora del Canal Magdalena y actual interventor de Puerto Buenos Aires. El funcionario expuso acerca del trabajo que está realizando junto con los miembros del equipo responsable de llevar adelante este proyecto esencial para el desarrollo de la Argentina. Los fondos ya están aprobados en el presupuesto nacional y la obra podría licitarse durante este año.
«La construcción del canal Magdalena es fundamental para fomentar la integración de los puertos argentinos. Además, permitirá fortalecer la navegación de cabotaje en nuestras aguas, generando nuevas fuentes de trabajo en la costa fluvial de la provincia de Buenos Aires. Desde la Unidad Ejecutoria a cargo de este proyecto hemos asumido el compromiso de avanzar en el llamado a licitación de manera ágil y rápida, priorizando y velando por la transparencia y legalidad a lo largo de todo el proceso», señaló Beni.
El Canal Magdalena, al ser un trayecto más corto y con menores niveles de sedimentación, resultará una opción superadora para la navegación segura y requerirá menores gastos de mantenimiento. De todos modos, Barbieri adelantó que, junto al Magdalena, continuará funcionando el Canal Punta Indio como hasta ahora.
De esta reunión del Consejo Federal Hidrovía participaron representantes del Ministerio de Defensa de la Nación; Ministerio de Seguridad de la Nación; Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca; Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto de la Nación; Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación; Prefectura Naval Argentina; Servicio de Hidrografía Naval; Instituto Nacional del Agua; Defensoría del Pueblo de la Nación Argentina; Universidad Nacional de San Martín; Universidad de Buenos Aires; Universidad Nacional de Rosario; Universidad Nacional del Litoral; Universidad Nacional de La Plata; Universidad Nacional del Nordeste; Universidad Nacional de Entre Ríos; Universidad Tecnológica Nacional; Consejo Federal de Inversiones; Federación Marítima Portuaria y de la Industria Naval de la República Argentina; Centro de Capitanes de Ultramar y Oficiales de la Marina Mercante; Unión Industrial Argentina; Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina; Consejo Portuario Argentino; Cámara de Puertos Privados Comerciales; Cámara de Actividades Portuarias y Marítimas; Cámara Naviera Argentina; Federación de Empresas Navieras Argentinas; Confederación Argentina de la Mediana Empresa; Confederación Intercooperativa Agropecuaria; Confederaciones Rurales Argentinas; Sociedad Rural Argentina; Asociación Argentina de Ingeniería Naval; Asociación Argentina de Ingenieros Portuarios; Asociación Civil Prácticos República Argentina; Centro de Navegación; Bolsa de Comercio de Rosario; Bolsa de Comercio de Santa Fe; Fundación Humedales; Fundación Taller Ecologista; Fundación Cauce Ambiental; Unidad de Información Financiera; Confederación General Económica; Intersindical Marítima Portuaria; Foro de Localidades Portuarias de la Provincia de Santa Fe; Municipio de Rosario; Municipio San Lorenzo; Municipio de San Martín; Comuna de Timbúes; Movimiento Arraigo y la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas, entre otros.
Como si con este amplio comité no alcanzara, el gobernador Capitanich propuso el armado de otras dos comisiones, una de puertos fluviales, y otra de relaciones internacionales porque según dijo «la hidrovía es demasiado importante para dejarla en manos de los diplomáticos». Meoni se sumó y a la movida y abogó por la creación de una comisión bicameral para dar seguimiento al armado de los pliegos y al proceso de licitación de la hidrovía.
Mientras tanto los días pasan, los casi 800 trabajadores de dragado y balizamiento van a la huelga para expresar su preocupación, y el país se encamina a una nueva cosecha que requerirá de una vía navegable dragada y señalizada como hasta ahora. De eso depende el ingreso de divisas vital para la Argentina.
Justo es decir que la culpa de esta situación no es patrimonio exclusivo del actual gobierno. Desde hace 11 años se sabe que esta concesión finalizará el 30 de abril de 2021. Durante ese tiempo pasaron varias administraciones de distinto signo político y poco se hizo para evitar este final anunciado. Fuente: Transport & Cargo