Redacción GlobalPorts//
La decisión de la empresa pesquera argentina Pesantar, integrada por el grupo Newsan y la española Profand, de encargar la construcción de su nuevo buque pesquero al astillero Nodosa, en España, ha generado inquietud en el sector naval argentino. La inversión de 40 millones de dólares en una embarcación destinada a la captura de merluza negra, que reemplazará al histórico B/P Echizen Maru, pone en evidencia la falta de incentivos para que este tipo de proyectos se desarrollen en los astilleros nacionales.
Desde los astilleros argentinos expresaron que cuentan con la capacidad técnica y operativa para asumir este tipo de construcciones, pero enfrentan dificultades derivadas de la falta de financiamiento, trabas regulatorias y políticas de importación de insumos, lo que termina empujando a las empresas a buscar opciones en el exterior.
Una oportunidad perdida para la industria naval argentina
El nuevo barco, de 85 metros de eslora y 14 de manga, con una capacidad de producción diaria de hasta 80.000 kilos, representa una modernización clave para la flota de Pesantar. Sin embargo, su construcción en España priva a la industria local de empleo y desarrollo tecnológico.
Astilleros locales han señalado que, con un adecuado respaldo estatal y financiero, podrían haber competido por este contrato, contribuyendo al fortalecimiento de la industria naval nacional y al mantenimiento de puestos de trabajo en el país.


La urgencia de políticas que fomenten la industria local
El caso de Pesantar no es aislado. En los últimos años, varias empresas han optado por encargar sus buques en astilleros extranjeros debido a la dificultad de acceso a financiamiento y la falta de incentivos para construir en el país. Este fenómeno afecta directamente la competitividad del sector naval argentino y genera una pérdida de divisas.
Mientras el buque de Pesantar se prepara para su entrega en abril de 2027, los actores de la industria naval local reiteran el pedido de una política clara de desarrollo para el sector, que fomente la construcción de embarcaciones en el país y evite que inversiones millonarias sigan emigrando al exterior.