La Corte Suprema de Justicia de la Nación desestimó este martes el recurso de la firma La Clementina S.A., ratificando la competencia del juez de Reconquista Fabián Lorenzini para administrar el concurso preventivo de Vicentín SAIC, empresa que acumula una deuda que supera los u$s 1.300 millones.

Redacción Globalports

Los ministros Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Juan Carlos Maqueda rechazaron en última instancia los cuestionamientos de La Clementina S.A., una semillera con base en la ciudad de San Jorge. La firma objetaba la competencia del juez Lorenzini, alegando un “vínculo profesional de más de 20 años” entre el magistrado y el Banco Nación Argentina, principal acreedor individual del concurso.

La Corte Suprema de Justicia desestima la queja, considerando que el recurso extraordinario es inadmisible“, se lee en la resolución del Máximo Tribunal. De esta manera, la competencia del juez Fabián Lorenzini queda ratificada.

Antecedentes del Caso

La agroexportadora Vicentín entró en concurso preventivo solicitando su formación ante los tribunales de la localidad de Reconquista, en la provincia de Santa Fe. El Juzgado de Primera Instancia de Distrito en lo Civil y Comercial 2, a cargo del juez Lorenzini, tomó el caso y se declaró competente para tramitarlo. Más de 1.600 personas físicas y jurídicas están involucradas en el caso como acreedores.

Propuesta de Acuerdo y Retos Pendientes

Recientemente, el Directorio de Vicentín presentó un posible plan de pagos para solventar su deuda, el cual ha sido aceptado en su mayoría según informaciones de la compañía. Sin embargo, varios acreedores del sector público y privado lo rechazaron, incluido el Banco Nación, Banco Provincia de Buenos Aires, BICE, AFIP y la firma Commodities, además del Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros y Desmontadores de Algodón.

La propuesta busca un rescate de la empresa a través de la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA) y las filiales argentinas de Bunge y Viterra. La homologación de este plan de pagos está pendiente de la decisión del juez Lorenzini.

Con la resolución de la Corte Suprema, se abre una nueva etapa en el Concurso de Acreedores de Vicentín, en la cual la administración del proceso queda definitivamente en manos del juzgado de Reconquista.