En un comunicado reciente titulado «Ante la reducción impositiva anunciada por el Gobierno: La industria pesquera expresa preocupación por su exclusión y alerta sobre una ‘situación de quebranto’«, las principales cámaras del sector pesquero, la Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de la Argentina (CAPeCA) y la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (CAPIP), expresaron su profunda inquietud tras haber quedado fuera del reciente anuncio del Gobierno Nacional sobre la reducción de retenciones.

Una industria clave bajo presión

En el comunicado se detalla que el sector pesquero argentino, que desde hace más de 150 años contribuye de manera fundamental al desarrollo económico del país, se encuentra en una situación crítica. Anualmente, procesa 793.000 toneladas de productos pesqueros, genera más de 46.000 empleos directos con salarios entre los más altos de la economía nacional y exporta a más de 100 mercados internacionales, aportando 1.981 millones de dólares en divisas.

La pesca es también la principal economía regional en provincias como Buenos Aires, Río Negro, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego, consolidándose como el octavo complejo productivo del país. Productos como langostinos, calamar y merluza representan el 80% de las exportaciones del sector. Sin embargo, esta destacada participación económica enfrenta un escenario adverso que podría afectar su continuidad.

Factores que agravan la crisis

El comunicado señala que la exclusión del sector pesquero del régimen de reducción de retenciones, combinada con la caída de los precios internacionales, los elevados costos operativos y una alta carga tributaria, amenaza la sostenibilidad de las actividades pesqueras. Además, las cámaras subrayan que el Consejo Federal Pesquero aumentó significativamente los Derechos Únicos de Extracción (DUE) en diciembre pasado, sumando más presión a una situación ya compleja.

“Esta combinación de factores pone en riesgo la continuidad de pesquerías muy importantes, que ya presentan una situación de quebranto”, afirmaron CAPeCA y CAPIP.

Impacto en la economía regional y la sostenibilidad ambiental

La exclusión del sector pesquero no solo afecta su viabilidad económica, sino que también compromete el desarrollo regional de comunidades costeras y una amplia red de actividades relacionadas, como la construcción y mantenimiento de embarcaciones, la logística y la producción de insumos.

Asimismo, las cámaras alertaron sobre el impacto que esta medida podría tener en los esfuerzos por garantizar la sostenibilidad ambiental de la pesca, una actividad que depende en gran medida del equilibrio ecológico y la protección de la biodiversidad marina.

Un llamado al Gobierno Nacional

El comunicado cierra con un pedido urgente al Poder Ejecutivo para que se incluya al sector pesquero en el régimen de reducción de retenciones. “Es crucial para evitar el impacto negativo sobre la sostenibilidad económica, social y ambiental de la industria pesquera, que es un motor estratégico para el desarrollo del país”, concluyen las entidades.